Chus Mateo, entrenador del Real Madrid de baloncesto, habló sobre su llegada al banquillo como sustituto de Pablo Laso, del que ha sido ayudante durante varios años, y afirmó que ‘no podía decir que no’.
“Acabamos con subidón ganando la liga. Fue muy bonito cómo acabó la liga y fue una sorpresa lo que pasó con Pablo. No lo esperamos, fue sorpresivo. Cuando sucedió esta situación y el club tomó la decisión de que no quería tomar ningún riesgo con la salud de Pablo, tuve que pensarlo”, dijo en la rueda de prensa previa a la disputa de la Supercopa.
“Pero llevo desde los 21 años en este club, como profesional he estado 13 años como ayudante en diferentes momentos, y no puedo decir que no. Ese fue el proceso y aunque fue una sensación agridulce, había que tomar una decisión y es la que ha habido”, añadió.
Sobre la relación actual con tu antecesor, declaró: “Con Pablo tengo buena relación, la voy a seguir manteniendo. Son conversaciones personales. Adoro a Pablo como persona y como entrenador. Es lo único que puedo decir. Lo demás queda entre nosotros”.
Mateo asume de manera natural la presión de entrenar al club blanco: “Hay que saber llevarla, existe siempre. Los jugadores se exigen siempre el máximo. Hay que desdramatizar ciertas cosas, hay que intentar aislarse bastante y hacer bien lo que toca hacer. No volverse demasiado loco, hacer el trabajo bien y ser pacientes sabiendo que el Madrid siempre quiere ganar’.
“No sé qué puedo aportar. El tiempo dirá si aporté algo, nada o he estropeado todo. Esperemos que no sea así. Estoy seguro de que vamos a hacer buenas cosas y que trabajaremos para estar lo más arriba posible”, apuntó.
Asimismo reflexionó sobre el camino que se abre ante él: “Me siento bien, con ganas de afrontar este reto. Sé perfectamente el club en el que estoy, sé la exigencia del Real Madrid. Las circunstancias son las que son, ahora no está Pablo y toca mirar par adelante. Me toca asumir la responsabilidad en un club que ambiciona siempre ganar todo”.
“Estoy bien, ilusionado, con ganas de afrontar una etapa nueva. Seguramente con una sensación agridulce porque Pablo no está este año. Le admiro y le quiero como persona, y es un fenómeno como entrenador. Las circunstancias son las que son y toca mirar para adelante”, agregó.
Su primera prueba de fuego será la Supercopa, a la que irá con trece jugadores entre los que están Poirier, Yabusele y Rudy Fernández, finalistas del último Europeo: “Mi idea es que todos puedan participar en algún momento”.
“Rudy, Poririer y Yabusele han estado hasta el final y eso les da un ritmo bueno de competición, pero no el conocimiento del juego que los otros llevan desde hace 15 ó 20 días. Como la idea es mantener el estilo de los últimos años, no habrá ningún problema en la adaptación de ellos”, añadió.
El Betis será su primer rival: “Alentado por la afición va a tener mucho apoyo. Es peligroso, está bien entrenado, será peligroso si no le prestamos atención y lo le respetamos. Tenemos que ser listos y no pensar más adelante que el partido contra el Betis. Tienen muy buenos jugadores y hay que estar pendiente de ellos, cualquiera te la puede liar”.
“El torneo es muy atractivo para el espectador, para los cuatro participantes. Es una motivación, el primero en juego. Un título que da tranquilidad si lo ganas. Es muy pronto porque todos los equipos están todavía trabajando, pero motiva porque es el primero en el calendario”, consideró.
Luego llegará la competición liguera: “Creo que vamos a tener una Liga Endesa muy potente, con muchos candidatos, no solo Real Madrid y Barcelona. Valencia, Joventut, Tenerife, Baskonia, Manresa… todos los que podamos pensar como candidatos a estar arriba van a estarlo”.
“Y seguro que se añadirán otros que conseguirán esa química que los entrenadores deseamos para conseguir objetivos. Sabemos que al Real Madrid siempre van a querer batirle porque es una motivación especial y tenemos que convivir con ello”, manifestó.
Por otro lado se refirió a un posible retorno de Facundo Campazzo: “No es que albergue ilusión. Tengo unos jugadores fantásticos y Campazzo de momento no es jugador nuestro. No sé si volverá a serlo. Le conocemos perfectamente, sabemos lo que puede dar, es extraordinario. Pero a día de hoy no es jugador del Real Madrid y ahora solo está en mi cabeza centrarme en el Betis“.