El Atlético de Madrid arrancó el año como todos los mortales, con la intención de mejorar. Ya saben, aquello de ir al gimnasio, visitar a nuestra madre, ponerse a dieta, aprender un idioma… Pero en el caso de los de Simeone, sí que se pusieron manos a la obra y dejaron, ante un valiente y ofensivo Levante, un buen partido con ocasiones, con vocación ofensiva, con intención de agradar. Una confirmación de que el equipo del Cholo está en la senda de reencontrarse a sí mismo. Ya saben, en esa manida temporada de transición, cualquier paso hacia delante es una señal de que se sigue en el camino adecuado.
¿La meta? Aún es complicada de vislumbrar. Pero como diría Machado (y perdonen el atrevimiento) caminante, no hay camino, se hace camino al andar. Y el Atlético camina, paso a paso, partido a partido. Y en muchas de esas etapas se ven cosas interesantes. Como la robustez de Felipe, como la electricidad de Correa cuando tiene el día bueno, como la experiencia y jerarquía de Herrera…
De momento, el triunfo le sirve a los del Cholo para recuperar la tercera posición, empatado a puntos con el Sevilla, que es la frontera mínima en la que moverse para los rojiblancos. A partir de ahí, a caminar hasta donde den las piernas. Y le sirve para llenar la cantimplora de la confianza, que la tenía medio agotada hace cosa de un mes y medio. Buena forma de encarar la Supercopa de Arabia Saudí, perdón, de España.
Si el Atlético sufrió algo en la segunda mitad fue por no cerrar antes el choque, porque contó con muchas ocasiones para ello. Y pudo haber pagado no haberlo hecho.
¿Y el Levante? Pues el Levante es uno de esos equipos honestos con el fútbol que tiene LaLiga, que van de frente y que tienen claros sus mecanismos de juego. Paco López ha hecho un gran trabajo, es un equipo de autor, como el propio Atlético. No extraña que haya enormes partidos este año o que tumbase al Barça. Con este nivel no debería tener problemas para no sólo mantenerse, sino para pelear por algo más.
ARRANQUE FULTURANTE
Primera mitad fulgurante, con muchas ocasiones y un gran ritmo de juego. Una parte atractiva para los aficionados y con alternativas en cada una de las porterías. Se suele desear entrar con buen pie en el año. Y el Atlético quiso hacerlo. Pudo firmarlo desde el primer minuto. Una triple ocasión nada más comenzar, que nacieron de una pillería de Correa al meter el cuerpo a su defensor. Primero era el argentino el que intentaba cruzarla con el exterior. Detenía Aitor Fernández en primera estancia. Luego era Joao Félix el que lo intentaba con el meta rival desequilibrado y varios defensas intentando evitar el gol. El balón tocaba en un defensor. Finalmente, Saúl, también de frente a la meta rival, la pegaba alto.
El Levante respondía siete minutos después con una jugada a balón parado, un saque de esquina, que cabeceaba Cabaco y el balón se iba ligeramente alto. Le tocaba el turno al Atlético, a balón parado también, con un cabezazo de Felipe, que domina el cielo, no hay duda. Qué capacidad del brasileño para conectar tanto en su área como en la contraria.
Ya decimos que el partido arrancó con mucho ritmo. El equipo colchonero se adelantaba a los 12 minutos, con una jugada marca de la casa. Una apertura sobresaliente y milimétrica de Thomas Partey, a la banda derecha, donde Trippier, de primeras, colocaba el centro en el área; para que Correa, también al primer toque, cruzase el balón ante la inútil estirada de Aitor Fernández.
En este punto del choque parecía que el rumbo del partido era rojiblanco. Sin embargo, el Levante, que fue de frente siempre en el partido, empataba rápidamente. Jugada de estrategia en una falta frontal. Campaña buscaba a Roger, ladeado, quien a media vuelta cabaza un remate que batía a Oblak. Jarro de agua fría para un Atlético que veía que no iba a ser tan sencillo como parecía pintar.
Sin embargo, el equipo colchonero respondía en la siguiente jugada. La tarde iba de golazos. Y le tocaba turno al central más circense. Felipe se sacaba un cabezazo inverosímil por la fuerza que le dio cuando retrocedía porque el balón no iba a la zona de impacto en el que estaba. Sobresaliente el brasileño, como siempre. Qué central. Lo celebraba con la tradicional voltereta marca de la casa.
De ahí hasta el final de la primera mitad, Correa tuvo otro remate que rozó su segundo. Morata se había plantado solo ante el meta rival, pero no había podido concretar el remate tras una heroica acción de Cabaco.
SEGUNDO
ACTO
La segunda mitad comenzó con un Levante aún más valiente, intentando hacer que el cuadro colchonero pasase apuros. Y más por situaciones posicionales que por ocasiones de peligro, sí que parecía que los de Paco López se acercaban al gol. Sin embargo, el Atlético también tenía las suyas, una de Morata en el área, casi sin ángulo que se iba al lateral de la red tras otro gran pase de Correa, un disparo de Joao Félix, discreto, desde fuera del área, una media vuelta de Herrera desde la frontal, un cabezazo de Correa en el área que Aitor Fernández tuvo que conjurar…
El partido se había convertido en un correcalles, con espacio para ambos, con intentonas en velocidad. Y ahí Simeone entendió que Vitolo podía ser una pieza útil. Sacó a Lodi del campo, colocó a Saúl en el lateral y metió al canario en el interior zurdo.
La ocasión más clara de la segunda mitad llegó a los 77 minutos. Un centro raso de Trippier a la frontal del área, donde Joao
Félix la pegaba, molestado por Coke, y el balón salía pegado al palo. Al luso le faltaba gasolina, como alguna vez ha deslizado el Cholo. Dos minutos después tenía una clarísima, se plantaba solo ante la portería pero se liaba, le faltaba velocidad y Coke le birlaba la cartera.
El Atlético no terminaba de cerrar el partido y en ese contexto pueden darse los accidentes. Estuvo a punto. Dominaba, tenía las ocasiones, pero el Levante quería decir lo suyo. Bardhi rozaba el 2-2 con una gran acción en el área en la que sacaba un disparo cayéndose y Oblak tenía que responder con una mano milagrosa. Y sobre todo, el esloveno se lucía con una parada a una mano con un remate de cabeza a bocajarro a remate final de Roger. Año nuevo, vicios viejos.
ATLÉTICO DE MADRID 2-1 LEVANTE
Atlético de Madrid: Oblak; Lodi (Vitolo, 63’), Giménez, Felipe, Trippier; Saúl, Thomas, Herrera, Correa; Joao Félix (Germán Valera, 86’) y Morata.
UD Levante: Aitor Fernández; Toño García, Erick Cabaco, Coke, Postigo, Bardhi, Radoja (Vukcevic, 84’) , Campaña, Rochina (Hernani, 71’), Mayoral (Morales, 45’) y Roger.
Goles: 1-0, Correa (Min.12); 1-1, Roger (Min.15’); 2-1, Felipe (Min.17)
Árbitro: De Burgos Bengoetxea (C. Vasco). Amonestó a Thomas (Min.26); Rochina (Min.43), Cabaco (Min.52), Vukcevic (Min.91)
Incidencias: Partido disputado en el Wanda Metropolitano.
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