El descenso del Girona ha provocado que la plantilla gerundense se haya convertido en un producto atractivo en el mercado para cualquier club de LaLiga e incluso, para algunos equipos del continente europeo, en cuanto a la UEFA se refiere.
Pocas horas después de que Quique Cárcel y Eusebio Sacristán ofreciesen la rueda de prensa de despedida del técnico de La Seca, las especulaciones sobre el futuro de muchos de los miembros de la plantilla no han dejado de aparecer.
De todos los futbolistas que han acabado la temporada y todavía tienen contrato con el club, un total de 17, quienes mejor cartel tienen para poder salir, son Stuani, Portu y Pere Pons, que aún no se han pronunciado sobre su futuro.
De lo contrario, quien sí que es ya cien por cien seguro que no va a continuar es el defensa vasco Jonas Ramalho. Aunque durante toda la temporada los movimientos del club y del futbolista apuntaban a que iba a renovar su vinculación, la mala racha que llevó al equipo a Segunda División frenó la ampliación del contrato y dentro de algo más de un mes va a dejar de ser jugador del Girona.
A estas alturas del mes de mayo quien es casi una evidencia que tampoco va a seguir vistiendo la camiseta gerundense es el guardameta Gorka Iraizoz, que después de dos temporadas a la sombra de Bono finaliza su relación con el club y no seguirá en Montilivi.
Precisamente sobre el futuro del portero marroquí se ha hablado mucho en las últimas horas. Según un periódico turco, el Fenerbache estaría dispuesto a hacerse con los servicios de Bono, que cuenta con varios pretendientes.
Los pesos pesados, con muchas ‘novias’
En Girona son conscientes que este es el momento para hacer caja, aprovechando que todos los pesos pesados de la plantilla tienen todavía contrato y que en ningún caso existe una cláusula liberatoria que vaya a dejar marchar a algún jugador gratis.
Pedro Porro, que va a abandonar seguro la disciplina gerundense y al que pretenden Valencia y muchos otros equipos, sigue con su cláusula de 50 millones, pero el descenso podría hacer que el Girona aceptase una oferta que ronde los 10 millones.
En cuanto a Portu, su precio rondaría también los 10 ‘kilos’. Equipos de la Liga como Celta y Real Sociedad están ya siguiendo la pista al delantero, que parece imposible que vaya a continuar.
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