Cinco días después de que su primer intento de retomar los entrenamientos este pasado martes fuera frenado por el Consejo Superior de Deportes (CSD), la Real, y todo el fútbol profesional, trabaja con la expectativa de que el regreso a los entrenamientos, inicialmente individualizados, esté más cerca. Con la Bundesliga como referencia más válida, ya que en Alemania la crisis sanitaria no es tan grave y son varios ya los equipos que han comenzado los entrenamientos, en la liga española existe la esperanza de que una vez finalice la fase más severa del confinamiento, a partir del 26 de abril, se pueda abrir una puerta para que en la liga española también se pueda entrenar.
La semana del 27 de abril al 3 de mayo sería la indicada para comenzar a levantar, poco a poco, las persianas de las ciudades deportivas. Bajo un protocolo sanitario muy estricto, totalmente en la línea de lo que planteaba la Real para volver a ejercitarse este martes, los equipos entienden que podrían volver a trabajar en grupos reducidos, con espaciamiento entre los futbolistas, en diversos campos, sin utilizar zonas comunes… Al fin y al cabo, con todas sus instalaciones desinfectadas en este tiempo de parón y con la enorme cantidad de medios de los que hoy en día disponen los clubs profesionales, el riesgo que, a su juicio, plantearía un entrenamiento es infinitamente menor al que puede existir en la cola de un supermercado o en otras facetas de la vida cotidiana.
Jugar es la gran prioridad
Poder concluir la temporada, jugar los 11 partidos restantes, es la gran prioridad de la Liga para minimizar los efectos negativos que esta crisis va a tener en sus arcas. Para ello va a ser obligatoria una fase de acondicionamiento, una mini pretemporada, de no menos de dos semanas ya que los equipos se han adentrado en la quinta semana sin entrenamientos colectivos, por lo que es posible que sea necesaria alguna más. Si se retomaran los entrenamientos a principios de mayo, el fútbol estaría en plazo de poder reanudar el campeonato a finales de mes o el primer fin de semana de junio. Al fin y al cabo, entre todos los bocetos de calendarios que maneja la UEFA, el más viable apuntaba a intentar finalizar las ligas entre junio y julio, siempre a puerta cerrada. Incluso habría flexibilidad para jugar en agosto ya que no hay una fecha tope para terminar.
La intención inicial de la Bundesliga era volver a jugar a partir del 9 de mayo. La decisión definitiva se tomará el 23 de abril. En el mejor de los casos, la liga teutona también debería concluir a puerta cerrada ya que Angela
Merkel anunció ayer que no se celebrarán acontecimientos deportivos en su país con público, al menos, hasta el 31 de agosto. La hipótesis de que se pueda volver a jugar dentro de tres semanas en Alemania, se vería en algunos clubs de la liga española como un espaldarazo para lo que luego pueda venir en otros países en peor situación sanitaria. En Italia se especula con volver a jugar el 31 de mayo.
La Liga de Fútbol Profesional, en su intento de que se pueda jugar, ha comunicado a los clubs que no escatimará esfuerzos económicos en forma de las herramientas necesarias (charters, hoteles…) para poder finalizar el campeonato.
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