De los equipos de la Premier a los que se ha enfrentado Erling Haaland con el Manchester City, el Liverpool es el único al que no ha podido marcarle. No lo hizo el 30 de julio en la Community Shield ni tampoco pudo el pasado domingo en Premier en Anfield, con Virgil van Dijk en versión titán, ayudado por un gran Joe Gomez y por el mejor Alisson. El resultado fue acabar con la racha de Haaland, que llevaba 9 partidos consecutivos marcando y ya no batirá el récord Jamie Hardy (11).
Van Dijk, en pugna con Haaland el pasado domingo (Photo by Laurence Griffiths/Getty Images)
Después de haber protagonizado un flojo inicio de temporada, como reconoció el propio capitán de los Países Bajos, Van Dijk fue ante el Manchester City de Pep Guardiola el que resultó absolutamente decisivo para que el Liverpool ganara la Champions 2018-19 y la Premier 2019-20, entre otros títulos. Dominante. Contundente. Certero. El jugador al que solo Leo Messi privó de ganar el Balón de Oro de 2019. El exbarcelonista solo obtuvo 7 puntos más que el defensa neerlandés, 2º.
El Liverpool nunca ha perdido en Anfield en Premier con Van Dijk en el campo (68 encuentros ya del zaguero de la ‘oranje’ invicto de local en el campeonato inglés). La racha siguió ante los ‘citizens’ y además Van Dijk acabó con la de Haaland, que llevaba 15 goles en Premier (de la que es ‘pichichi’) en 9 encuentros seguidos marcando.
Van Dijk no le dejó ningún espacio a Haaland. El viernes, dos días antes del Liverpool-City, el propio defensa del Liverpool dio la clave respecto a Haaland: “Tenemos que impedir que le lleguen balones y estar a nuestro mejor nivel”.
Y Van Dijk, con la ayuda de un Joe Gomez estelar, supieron anular a Haaland, con anticipación y contundencia. Se exhibieron ante la sensación del fútbol mundial, impidiéndole hacer su juego. Y Mohamed Salah acabó de sentenciar con su gran gol. Tarde de ensueño para un Liverpool imperial.