Era un secreto a voces y ya es oficial. Asier Córdoba ya luce los colores de Osasuna. El extremo zurdo, hermano del jugador del Athletic
Iñigo, finalizó su contrato en Lezama el pasado 30 de junio y aceptó la oferta navarra. También había algún que otro club llamando a su puerta. Firma para las dos próximas temporadas y Osasuna tiene la opción de ampliar la vinculación de forma unilateral hasta 2023.
Córdoba jugó en el Bilbao Athletic durante las dos últimas campañas, aunque sin gozar de excesiva continuidad. En este reciente curso participó en catorce encuentros, sin embargo solo en dos partió en la alineación inicial. Su bagaje de minutos con los cachorros fue de 329. Hizo un gol, el último que anotó el filial antes de que se decretara el parón de las competiciones, en el 3-3 contra el Real Unión.
Ahora seguirá haciendo su camino en tierras navarras. “Estoy muy feliz y con muchas ganas de iniciar esta nueva etapa en mi carrera”, asegura Córdoba en declaraciones recogidas en la página web de Osasuna. Todo apunta a que se enrolará en el filial rojillo, que en este ejercicio también compitió en el grupo II de Segunda B.
“El proyecto me atrae mucho y creo que me va a ayudar a crecer como jugador y como persona”, añade el atacante bilbaíno. Se define como “un chaval que trabaja mucho y al que le gusta dar el máximo siempre” y su objetivo es “poder ayudar al equipo” a conseguir sus metas. Los hermanos Córdoba no podrán compartir vestuario en el Athletic… al menos por el momento.
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