El mexicano del Oporto Jesús Corona y el uruguayo del Benfica
Darwin Núñez mostraron en el día de hoy su mejor versión futbolística en las victorias ligueras con sus respectivos encuentros.
El Benfica no falló en su compromiso en casa ante el Moreirense, al que derrotó por 2-0, aunque la diferencia de goles pudo ser mucho mayor.
Abrió el marcador el central internacional Ruben Dias, que tras el encuentro reconoció que “fue un partido muy especial”, ya que tiene pie y medio en el Manchester City de Pep Guardiola.
El segundo tanto lo anotó el internacional suizo Aris Seferovic, tras una excelente galopada del uruguayo Darwin Núñez por la banda derecha que sirvió para que el exjugador de la Real Sociedad marcara a placer.
Al término del encuentro, el técnico del Benfica Jorge Jesús elogió el juego del joven internacional uruguayo Darwin Núñez, que llegó este verano a Lisboa procedente del Almería.
“Tiene todo para ser un gran jugador”, aseguró el técnico en zona mixta”, quien insistió en su capacidad como delantero.
Por su parte, el conjunto del Oporto se impuso en el derbi local a la escuadra del Boavista.
Hubo lucha en la primera mitad, donde el joven central mexicano Alejandro Gómez y el español Javi García mostraron su fortaleza en la zaga y en la medular de los “ajedrezados”.
Tras una primera mitad con más guerra que ocasiones, el mexicano Jesús “Tecatito” Corona abrió el marcador para el Oporto en el 47, y en el 59 el centrocampista luso Sérgio Oliveira anotaba el 2-0 tras lanzar una falta que desvió Javi García y acabó en la red.
El partido lo sentenciaba en el 67 y en el 71 el delantero maliense Moussa Marega, que marcó por partida doble.
Y en el descuento, el colombiano Luis Diaz se sumó a la fiesta goleadora tras anotar el quinto tanto.
En la jornada de hoy, el Tondela de Pako Ayestarán sucumbió en Funchal ante los insulares del Marítimo por 2-1.
Los goles del partido llevaron todos la firma de Brasil. Rodrigo Pinho anotó los dos tantos del Marítimo, mientras que el gol del Tondela lo marcó Pedro Augusto.
Todas las miradas de ese partido se centraban en el bruneano Faiq Bolkiah, el futbolista más rico del mundo que fichó esta semana por el Marítimo, aunque no fue convocado para la cita.
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