Entre la Secretaría de Salud, Insabi y Conacyt invirtieron 259 millones 891 mil 592 pesos para desarrollar los equipos de ventilación mecánica.
El Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), en coordinación con instancias, del gobierno, así como los sectores empresarial y académico, creó dos ventiladores: Ehécatl 4T y Gätsi.
El primero fue diseñado por el Centro de Ingeniería y Desarrollo Industrial (Cidesi), un centro público de investigación del Conacyt. Tendrá una patente 100 por ciento del Estado mexicano. Mientras que el segundo se elaboró en colaboración con la empresa Dydetec.
Durante la conferencia matutina, María Elena Álvarez-Buylla Roces, directora general del Conacyt, indicó que ambos equipos son de alta especialidad y comparten un alto grado de seguridad biomédica, sensores de control, ventilación controlada por presión y volumen, y fácil limpieza.
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“Para lograr esto, hicimos una coordinación de sectores del gobierno mexicano, también de empresas, del sector académico, y el reto es justamente invertir esta relación entre gasto y eficiencia. En regímenes pasados, aumentaba el gasto, pero bajaba la eficiencia, en este nuevo régimen de la Cuarta Transformación, a pesar de que no aumenta el gasto, la eficiencia en innovación, en cambio tecnológico de vanguardia está aumentando”, dijo Álvarez-Buylla.
El Ehécatl 4T posee un microcontrolador que calcula y aplica la presión necesaria en los ciclos de ventilación en pacientes, por medio de una bolsa autoinflable llamada ambu bag, explica un video presentado por la funcionaria en Palacio Nacional.
En el caso del Gätsi, la ventilación mecánica está basada en un sistema de control por microprocesadores accionados neumáticamente.
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“La unidad de control que posee este equipo tiene la capacidad de calcular y aplicar las funciones necesarias para impulsar la ventilación mecánica controlada o asistida durante los ciclos de ventilación en pacientes adultos y pediátricos”, detalla el video.
Ambos modelos fueron probados en pulmones artificiales y sistemas biológicos, además de que cumplen con especificaciones internacionales.
“Ambos son ventiladores mecánicos invasivos de mezcla de gases”, explicó la directora general del Conacyt.
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Respecto a los costos de inversión, Álvarez-Buylla aseguró que crear estos dos equipos fue muchísimo más barato que lo que hubiera implicado la compra de mil ventiladores, cantidad que ya se está fabricando; serán 500 Ehécatl 4T y 500 Gätsi.
“Habría sido mucho más caro el adquirirlos en el extranjero e inclusive en alguna de las empresas nacionales”, sostuvo.
La Secretaría de Salud (Ssa) y el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) invirtieron 227 millones 391 mil 592 pesos, y Conacyt 32 millones 500 mil pesos, es decir, en total la inversión para los ventiladores representó 259 millones 891 mil 592 pesos.
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“Lo más sobresaliente de esto es que logramos en cinco meses lo que generalmente dura o tarda entre tres y cinco años para desarrollarse”, apuntó.
“En resumidas cuentas, la soberanía científica y la independencia tecnológica es la forma de responder de este Gobierno de México a los retos, en particular estamos viendo el nacimiento de una empresa nacional para salvar vidas”.