El Chelsea sigue aligerando la plantilla que dirigirá la próxima temporada Mauricio Pochettino y, en consecuencia, su masa salarial gracias a los petrodólares de Arabia Saudí. Tras la marcha ya oficial del medio francés N’Golo Kanté (32 años) al Al Ittihad como agente libre al acabar contrato, y anunciar hoy mismo el Al Hilal el fichaje del central senegalés Kalidou Koulibaly (32 años) por 25 millones de euros, en las próximas horas a ambos se añadirá a la lista un tercer jugador.
Édouard Mendy también está a punto de hacer las maletas rumbo a Arabia Saudí. Fichado en 2020 por el Chelsea del Rennes, el portero senegalés es esperado el lunes en Riad para ser sometido a los exámenes médicos previos a sus firma después de que el club londinense haya llegado a un acuerdo para con el Al Ahli para su traspaso.
Y la lista no termina aquí. El siguiente en recalar en el fútbol saudí será el extremo marroquí Hakim Ziyech, de 30 años y que llegó al Chelsea en 2020 procedente del Ajax pero cuyo paso por Stamford Bridge ha resultado decepcionante.
Arabia, en el accionariado del Chelsea
De esta forma se confirmarían los rumores de que el Fondo de Inversión Público (PIF) de Arabia Saudí, propiedad de la familia real del país árabe y que supuestamente participa en el accionariado del Chelsea, está ayudando al club inglés a buscar acomodo a jugadores con fichas altas como los citados para aligerar masa salarial con objeto de ajustarse al fair play financiero tras gastar 600 millones en fichajes desde que el estadounidense Todd Boehly se convirtió en su propietario en mayo de 2022.