Julen Lopetegui, entrenador del Sevilla, reconoció al término del encuentro ante el Levante que su equipo empató en los últimos minutos cuando parecía tener el triunfo en el bolsillo que realizar los cinco cambios perjudicó al rendimiento general en los últimos 15 minutos.
El gol en propia puerta de Diego Carlos restó dos puntos a un equipo que se habría disparado en la tabla en la tercera posición con respecto a sus perseguidores de haber ganado en La Nucía, donde el tanto de Luuk de Jong al inicio de la segunda mitad y el control posterior que el Sevilla parecía tener del partido parecía que eran suficientes.
Pero Lopetegui hizo tres cambios de una tacada en el minuto 63 poniendo en el campo a Suso, a Fernando y a Óliver Torres por Munir, uno de los más destacados en el partido y asistente de lujo en el gol, Joan Jordán y Banega. Después, En Nesyri salió por De Jong y, por último, ante la salida muy activa de Hernani en la banda derecha del Levante, el técnico vasco optó por sentar a Ocampos y sacar a Reguilón, redoblando las tareas defensivas en una banda izquierda en la que optó por un doble lateral junto a Escudero.
El resultado es que el Sevilla dio un importante paso atrás después de la última pasa para la hidratación, el Levante empató y hasta pudo remontar si no fuera por dos intervenciones de Kounde salvando un balón casi en la raya y Vaclik en un disparo desde fuera del área.
“La responsabilidad es del entrenador seguramente, teniendo la posibilidad de hacer cinco cambios, momento en el que ellos también han apretado más. Nosotros no hemos sabido manejar la situación. La manera es buscar el segundo y no lo hemos logrado”, reconoció Lopetegui tras el partido.
Las dudas han vuelto a surgir en un sector de la afición en torno a la figura de Lopetegui y cierta tendencia a defender una ventaja corta como es un 0-1 en el partido, algo que también se le criticó, por ejemplo, en la cita ante el Celta en Balaídos, cuando el equipo vigués remontó un 0-1 y acabó ganando por 2-1.
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