Cuba suspende los aranceles a los alimentos y medicinas que los viajeros llevan a la isla

Los viajeros que lleguen a Cuba a partir del próximo lunes podrán introducir en el país comida, productos de aseo y medicamentos sin límite de peso y sin pagar aranceles aduaneros hasta el 31 de diciembre, anunció el miércoles el primer ministro cubano, Manuel Marrero. La medida se ha adoptado después de que Cuba viviera el pasado domingo las mayores protestas en varias décadas, en las que los manifestantes expresaron su descontento con el Gobierno por la escasez de productos básicos y medicinas, por los cortes de electricidad y la gestión de la pandemia de la covid-19. Las reivindicaciones por la crisis se mezclaron con eslóganes que denunciaban la falta de libertades en la isla.

En vídeo, el anuncio de Manuel Marrero, primer ministro cubano.ARIEL LEY ROYERO / VÍDEO: EFE

Durante una reunión retransmitida por la televisión cubana, en la que también participaron el presidente, Miguel Díaz-Canel, y varios ministros, entre ellos el de Economía, Alejandro Gil, el primer ministro Marrero aseguró que esta decisión responde a “una demanda hecha por muchos viajeros” y que era “necesario” aplicarla. El Gobierno cubano ha afirmado que evaluará una posible prórroga de la suspensión de aranceles cuando acabe este año.

Más información

Los viajeros que entran en Cuba pueden introducir ahora hasta 10 kilos de medicinas sin pagar impuestos. Sin embargo, incluso la limitada cantidad de comida y productos de higiene personal que están autorizados a llevar consigo están gravados con aranceles.

Debido a las restricciones de viaje por la pandemia de la covid-19, el número de personas que llegan a Cuba se ha reducido drásticamente en el último año, por lo que el impacto de la medida será limitado. “No, no queremos migajas. Queremos libertad”, ha reaccionado la conocida bloguera y disidente cubana Yoani Sánchez, tras el anuncio de las autoridades. “La sangre no se derramó en las calles cubanas para poder importar unas maletas de más”, ha apostillado en un tuit.

Sánchez hace así alusión a la muerte de un manifestante el martes y también a la detención de más de un centenar de personas, en unas protestas inusuales en la isla caribeña.

Mientras tanto, las autoridades cubanas restablecieron el miércoles por la noche el acceso a Internet, según la agencia France Presse. La suspensión del acceso a la red había contribuido a enfriar las protestas que estallaron el domingo, en las que las redes sociales fueron claves.

Cientos de cubanos empezaron a protestar el domingo en las localidades de San Antonio de los Baños, cerca de La Habana, y Palma Soriano, en Santiago, una chispa que después se extendió por el país. En principio, era una protesta por los largos apagones de electricidad y para exigir la vacunación contra la covid-19. Poco después, las demandas se convirtieron en gritos de “libertad” y exigencias de cambios políticos.

La protesta llegó a Facebook y se difundió en directo, con proclamas tan inusuales como “abajo la dictadura” o “no tenemos miedo al comunismo”. En varios puntos, como Cárdenas, en el oeste de la isla, hubo saqueos a tiendas estatales y coches de policía fueron atacados.

Las protestas han sido reprimidas con dureza por el Gobierno, que llamó a los revolucionarios a combatir las manifestaciones en las calles. Las autoridades cubanas confirmaron el martes a través de la Agencia Cubana de Noticias (ACN) que un manifestante, un hombre de 36 años, había muerto en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad en un barrio de La Habana. Un fotógrafo español de la agencia Associated Press (AP), Ramón Espinosa, fue agredido por agentes del orden.

La pandemia de la covid-19 ha tenido un grave impacto en la economía de la isla, en particular en uno de los sectores que da de comer a muchos cubanos: el turismo. La caída de entrada de divisas que ello representa se ha visto agravada por una mala cosecha de caña de azúcar, otra de las fuentes de ingresos del Estado cubano. Este descenso de recursos ha tenido como consecuencia la reducción de la importación de productos de primera necesidad por parte de las autoridades de la isla, lo que ha agravado la escasez.


Source link