Stephen Curry envejece como el buen vino. Anoche volvió a demostrarlo al enchufar diez triples en la victoria de los Golden State Warriors por 111-105 ante los Orlando Magic, que el base dominó con una sublime actuación de 40 puntos, 8 rebotes y 5 asistencias.
En su duodécima temporada, con 32 años, Curry promedia 30 puntos por partido. Son cifras al nivel de Michael Jordan e incluso un poco por encima de Kobe Bryant o Bernard King tras alcanzar el primer cuarto del curso. La sensación que transmite cada vez que abandona la pista el jugador es que deja tras de sí un aura mágica.
Para Curry, un triple es casi como una bandeja para el resto de mortales. La estrella encadena 13 partidos consecutivos anotando cuatro triples o más, la mejor racha de su trayectoria.
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Aunque no es novedad, su decimoséptimo partido por encima de los diez triples (anoche 10 de 19) lidera esta estadística en la NBA. Le sigue con cinco partidos así Klay Thompson, su Splash Brother lesionado.
Sus números y su manera de convertir en rutinario lo extraordinario han vuelto a meter a Curry en la conversación por el MVP. “Mi baloncesto habla por sí mismo”, declaró él. “Intento no distraerme porque desenfoca el momento. Si hago mi trabajo, estaré ahí al final de año”.
Steve Kerr, su entrenador, lo tiene más claro: “¿Cómo no iba a estarlo? Es de otro mundo”. El excompañero de Jordan, que sabe un trecho de grandes jugadores, reflexionó una ves más sobre la excelencia de su pupilo: “Es una rutina para él, lo cuál es una locura. Simplemente esperas que esto ocurra”.
Ante tal aluvión, las defensas rivales no saben ni por dónde empezar. Con cuatro bajas importantes, los Magic ya hicieron mucho con no bajar los brazos y presentar batalla hasta el descanso (47-55) después de endosar un parcial de 12-33 a los locales.
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Nikola Vucevic volvió a destacar para Orlando con 25 puntos y 13 rebotes, pero el juego del pívot montenegrino es ahora mismo un solar en Florida: novena derrota en los últimos once partidos.
Los Warriors empezaron a todo trapo desde el perímetro, e intentaron una cifra récord de 30 triples en la primera mitad. Al final sus números fueron de 20 aciertos en 50 intentos totales.
Andrew Wiggins, con 21 puntos, 7 rebotes y 3 asistencias, y Kelly Oubre Jr., con 17 tantos, 10 rebotes y 4 asistencias, acompañaron a Curry en el apartado anotador. Draymond Green, una vez más, se dedicó a organizar el juego de Golden State con 8 puntos, 6 rebotes y 11 asistencias en el partido. James Wiseman sigue lesionado y los Warriors le quieren entre algodones por ahora.
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