¿Era esta la pieza que les faltaba? Tras un año fantástico en el que superaron las expectativas y se quedaron a las puertas de las Finales de la NBA, los Dallas Mavericks ya han empezado a trabajar de cara al curso que viene y han realizado su primer movimiento.
Los Mavs se han hecho con los servicios de Christian Wood y a cambio han enviado a los Rockets a Boban Marjanovic, Sterling Brown, Trey Burke, Marquese Chriss y la 26º elección del Draft de este año.
El movimiento abre la veda de los traspasos de este verano y lo hace a lo grande, antes incluso de terminar la temporada. A Warriors y Celtics aún les queda, por lo menos, un encuentro por jugar pero Dallas ya trabaja en clave de futuro.
El movimiento incluye a cuatro jugadores que apenas habían contado para Jason Kidd y logra a cambio de ellos un jugador titular en un puesto de muchísima necesidad.
Cierto es que el año de Wood en Houston ha estado plagado de altibajos pero sigue siendo un jugador puntero con el que Dallas espera dar otro salto de calidad de cara a la temporada que viene.
Ahora bien, ¿Es suficiente para elevar el techo de los Mavericks? Esta pregunta es la que se hacen los aficionados de la franquicia, que pese a ser conscientes de lo bien que puede encajar Wood en ataque con Luka Doncic a su lado, siguen con dudas respecto al techo de este equipo.