Damian Lillard rebasó este fin de semana la barrera de los 18.000 puntos en la NBA, y el hito le sirvió para reivindicar su posición en el olimpo de los tiradores en la historia de la liga estadounidense. El base y estrella de los Portland Trail Blazers dice no comprender por qué la gente no le incluye en sus listas con los jugadores más destacados de todos los tiempos.
“Siempre veo que hablan de los mejores tiradores de la historia y hay quienes tratan de locos a quienes me mencionan a mí. Por los triples que he metido, la consistencia y el nivel de dificultad en que estoy anotando a lo largo de los años, creo que es una locura que no se hable más de mí“, explica el jugador en declaraciones al portal de los Blazers en NBA.com
“Obviamente, pienso que Steph es el más grande de todos los tiempos, pero después de él no veo por qué no estoy yo de forma clara. No solo por los aciertos, sino por cómo lanzo, cómo meto tiros difíciles todo el rato, lo fácil que es para mí lanzar. Tengo ganas de seguir escalando en la lista, y cuando esté en el Top 2 o 3, tengo curiosidad por ver qué dicen entonces de mí”, añade.
En su último partido contra los Houston Rockets, Lillard rebasó los 18.000 y se quedó a un suspiro de convertirse en el máximo anotador de los Portland Trail Blazers, superando al legendario Clyde Drexler. Ocurrirá en uno o dos partidos. El base es el 77º jugador de la liga que amasa tantos puntos en su trayectoria deportiva, el octavo en activo que lo logra.