El pívot de los Phoenix Suns Deandre Ayton sigue en Arizona, aunque todavía parece incómodo después del fuerte desacuerdo que tuvo con su entrenador Monty Williams y la franquicia durante el descalabro del equipo en los playoffs de 2022. Castigado y señalado en el fondo del banquillo durante la derrota contra los Dallas Mavericks en el séptimo partido de las semifinales de conferencia, el teórico titular del equipo comentó durante el Media Day que sigue sin hablarse con su técnico.
“No he hablado con él desde ese partido”, afirmó, seco y contundente, el jugador de 24 años. “Puedo demostrarle más que explicarle, así es la vida. A nadie le importa la naturaleza incómoda de las cosas. Se trata de qué aportas y cómo compites. Y lo dicho, dicho está”. En verano, los Indiana Pacers le ofrecieron 133 millones de dólares y cuatro temporadas, una oferta que igualaron los Suns para quedarse con sus servicios.
Ayton estaba enfadado por el desplante de su entrenador y, también, por no haber recibido una oferta de renovación por el máximo directamente de Phoenix, que quería ahorrarse dinero al no confiar al 100% en su jugador.
El pívot tan solo disputó 17 minutos durante la derrota por 33 puntos que mandó al garete la temporada de 64 victorias de los Suns. Preguntado sobre el asunto, Williams dijo que la decisión respondía a “asuntos internos”, sin añadir detalles. Ante la prensa, intentando disipar la polémica, el entrenador piropeó al jugador: “Es un gran jugador y un buen tipo. A veces hay baches, pero eso no define a una persona en su totalidad”.
Ayton promedió 17,2 puntos y 10,2 rebotes el curso pasado para Phoenix, que buscará un año más el anillo que se les resiste desde su irrupción como candidatos en las Finales de la NBA de 2021.