LOS ÁNGELES, California – Cinco aspirantes demócratas a ocupar la Casa Blanca en las elecciones de 2020 propusieron el domingo políticas migratorias que incluyen a los 11 millones de indocumentados que viven en Estados Unidos, totalmente opuestas a las del actual gobierno.
En un foro organizado para discutir temas hispanos en la Universidad Estatal de California Los Ángeles (CalState LA), Bernie Sanders, Kamala Harris, Julián Castro, Pete Buttigieg y Tom Steyer coincidieron en la idea de que EEUU necesita terminar con la presunta división fomentada por las políticas del gobierno del presidente Donald Trump.
En ese sentido, Sanders subrayó que “en particular le preocupa el racismo y la demonización de los indocumentados en el país” por parte del actual gobierno, por lo que, de llegar a la presidencia, anularía todas las órdenes ejecutivas en contra de los inmigrantes, restablecería el programa de Acción Diferida (DACA) y lucharía por aprobar una reforma migratoria comprensiva.
El senador por Vermont también tiene en la mira un cambio radical de la estrategia de seguridad de la frontera.
“Nosotros estableceremos una política humana en la frontera, la cual no incluye agentes federales quitándole a los bebés de los brazos de sus padres”, agregó.
Por su parte, el millonario Tom Steyer, que se lanzó a la carrera por la candidatura demócrata hace apenas cuatro meses, aseguró que la Administración de Trump está “torturando” a los niños migrantes que llegan a la frontera.
“En el día uno (de su hipotética presidencia) tenemos que asegurarnos que este trauma que están experimentando estos niños termine lo más pronto posible”, aseguró Steyer.
Para Harris, uno de las principales obstáculos para solucionar los problemas de la frontera, y de la llegada masiva de solicitantes de asilo, es lidiar con la falsa creencia de que a los defensores de los migrantes no les interesa la seguridad de la frontera.
“Nadie en este movimiento, (la organización pro inmigrantes) Chirla, los líderes del Caucus latino, está diciendo que no queremos seguridad en la frontera, este es un punto que lo usan los republicanos y Donald Trump para crear miedo y no hacer lo correcto”, señaló.
La senadora por California, al igual que el exsecretario de Vivenda Julián Castro, propusieron un cambio radical a la Oficina de Control de Inmigración y Aduanas (ICE).
“Creo que ICE está fracturado. Culturalmente está destrozado, yo lo reformaría y reintentaría el acercamiento de cómo aplicamos nuestras leyes de inmigración de una forma más inteligente, más humana y más efectiva”, señaló Castro.
Para, el alcalde de South Bend, Indiana, Pete Buttigieg, el cambio debe comenzar por no tolerar el racismo y los prejuicios en contra de los latinos.
El aspirante demócrata más joven de la contienda, con 37 años, asegura que se deben tomar pasos importantes en reforzar las leyes que castigan los crímenes de odio.
“Están diciéndole a la gente que usted no pertenece (aquí) y esto tiene consecuencias peligrosas. Sabemos que este país se empeora por las fracturas causadas por prejuicio racial”, puntualizó.
Los cinco aspirantes también coincidieron en la necesidad de buscar mejores oportunidades económicas para los trabajadores hispanos, la educación y los planes de salud, entre otros aspectos de la vida cotidiana.
Sanders fue contundente al afirmar que su propuesta de “Salud para Todos”, incluye a los indocumentados.
“Cuando digo todos, es todos”, recalcó el senador por Vermont, que lidera en las preferencias entre los latinos en California, según una reciente encuesta.
El foro, en el que los candidatos no compartieron escenario, fue organizado por Pat Brown Institute for Public Affairs, California Latino Legislative Caucus Foundation, y el Fondo de Acción de la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes (Chirla).
El encuentro culminó con un llamado a los votantes demócratas a participar en las primarias de este partido que se realizarán el 3 de marzo del 2020.