Al menos 40 especialistas de Pemex trabajan para controlar la fuga de amoníaco que se reportó en la comunidad de Donají, municipio de Matías Romero, Oaxaca; donde no se reportaron personas lesionadas o afectadas por esta emergencia.
Sin embargo, más del 80% de la población fue albergada desde el viernes en un refugio de la agencia municipal de Palomares, reportó la Coordinación Estatal de Protección Civil del Estado de Oaxaca (CEPCO).
Las actividades en la comunidad de Donají se reanudarán hasta que no exista riesgo.
Los 40 trabajadores de Pemex realizan la excavación en el lugar donde se detectó la fuga del amoníaco, ubicada a unos tres kilómetros al oriente del tramo 153 de la Carretera Transístmica, equipados con tanques de oxígeno y mascarillas.
En el sitio se encuentran elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) resguardando la zona, mientras se llevan a cabo los trabajos de sellado del ducto donde se registró la fuga de amoniaco.
La Unión de Comunidades Indígenas de la Zona Norte del Istmo (UCIZONI) hizo un llamado a autoridades federales para atender la situación ya que consideran que la falta de mantenimiento en infraestructura de Pemex, ha provocado 11 fugas de hidrocarburos, 4 de amoníaco- que afectan al ambiente y a las personas en las comunidades dónde ocurrieron los siniestros.
Ante la gravedad de esta situación, la Unión de Comunidades Indígenas de la Zona Norte del Istmo hace un llamado enérgico a la Secretaria de Energía, al Secretario de Gobernación, al Director general de Pemex y al gobernador de Oaxaca para que atiendan con seriedad esta emergencia, la cual en buena medida es de su responsabilidad y competencia.
Puntualizan mediante un comunicado que estas fugas afectan a playas, ríos, arroyos y vegetación de la zona, además de la mortandad entre la fauna y flora, por lo que resaltan la necesidad de que se atienda la corrosión de los ductos; sobre todo que atiendan las necesidades de las personas que han tenido que ser evacuadas de sus territorios.
“Si bien la falta de mantenimiento de los ductos tiene ya muchos años, ha sido en los últimos meses que esta problemática se ha agudizado por una mala entendida política de austeridad. Basta ya que las comunidades indígenas y campesinas paguen un alto costo por la incompetencia y negligencia de las dependencias de gobierno.”.
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