El seleccionador de Francia, Didier Deschamps, se mostró este viernes cauto de cara al partido de mañana ante Hungría y recordó que, pese al gran nivel mostrado ante Alemania en la primera jornada (1-0), les espera un partido muy diferente en Budapest.
“El primer partido fue importante, pero no decisivo. Intentaremos jugar con la misma actitud para ganar y asegurar la clasificación, ese es nuestro objetivo principal”, explicó el técnico en rueda de prensa.
Deschamps anunció que es muy probable que alinee el mismo once que tan bien funcionó ante la selección alemana, aunque no descartó introducir “un par de cambios”.
El seleccionador confirmó la disponibilidad de Pavard y Hernandez, que habían mostrados molestias en los últimos días.
“El caso de Hernandez está solucionado por el personal médico y Pavard tuvo un choque sin consecuencias. No hay preocupación sobre la disponibilidad o preparación de estos jugadores”, afirmó a preguntas de los periodistas.
En relación a jugar en el Estadio Puskás Aréna de Budapest, con un aforo de más de 60.000 aficionados, Deschamps reconoció los importantes que será para el equipo local, que plantó cara a Portugal hasta los últimos minutos de partido que acabó perdiendo 0 a 3.
En esta misma línea habló también el portero de la selección francesa, Hugo
Lloris, que definió a Hungría como un equipo “solidario y bien organizado”.
“Estarán ante su público y con la motivación de jugar contra Francia. No será un partido fácil”, explicó.
El capitán de Francia pidió animó a sus compañeros que no subestimen a Hungría y remarcó que el partido, pese a partir como favoritos, no será “un paseo por el parque“.
Lloris espera un enfrentamiento opuesto al de Alemania, con su equipo teniendo mayor posesión y con la presión de mover el balón rápido para abrir espacios en la defensa rival.
“Tendremos que gestionar la situación, pero siempre con el deseo de ganar. La fuerza de nuestro equipo es el espíritu de competición. Queremos ganar y queremos hacerlo juntos”, concluyó.
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