La Fiscalía General de la República (FGR), a través de la Fiscalía Especializada en materia de Delincuencia Organizada (FEMDO), obtuvo del Juez Segundo de Distrito de Procesos Penales Federales en el Estado de México, con sede en Toluca de Lerdo, auto de formal prisión en contra de Eduardo Arellano Félix, exlíder del Cártel de Tijuana, quien es acusado por ser probable responsable del delito de delincuencia organizada con la finalidad de cometer delitos contra la salud.
A través de un comunicado, la FGR señaló que con motivo del cumplimiento de una orden de aprehensión obtenida por la FEMDO, Eduardo “A”, fue detenido el pasado 23 de agosto de 2021 en el Puente Internacional Brownsville-Matamoros, por elementos de la Policía Federal Ministerial (PFM), con apoyo de elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), y después trasladado al Centro Federal de Readaptación Social número 1 “Altiplano”, en Almoloya de Juárez, Estado de México.
Posteriormente, indicó, en audiencia celebrada por videoconferencia, Eduardo “A”, acompañado de su abogado defensor, rindió su declaración preparatoria. Asimismo, se reservó su derecho a declarar y no solicitó la duplicidad del término constitucional, por lo que el juez determinó dictar dicho auto de formal prisión.
#FGR a través de la #FEMDO obtiene auto de formal prisión en contra de Eduardo “A”, por ser probable responsable del delito de delincuencia organizada con la finalidad de cometer delitos contra la salud.
Más información ➡️ https://t.co/ObYXUyrD14 pic.twitter.com/rbyKZdOyx3
— FGR México (@FGRMexico) August 29, 2021
Te puede interesar: Es la primera vez que Eduardo Arellano será procesado en México por delitos relacionados con narcotráfico | Entérate
“Eduardo “A”, fue detenido en 2008 en Tijuana, Baja California, para ser posteriormente extraditado a Estados Unidos en 2012 por numerosas acusaciones de diversos delitos, respecto a lo cual las autoridades de ese país ofrecían una recompensa de cinco millones de dólares.
El sujeto cumplía una sentencia de 15 años de cárcel por lavado de dinero; sin embargo, no completó su sentencia como resultado de su amplia cooperación con las autoridades estadounidenses, la cual comenzó en mayo de 2013 cuando se declaró culpable.
Después de cumplir esa parte de condena en una prisión federal de baja seguridad en Allentown, Pensilvania, el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos lo puso a disposición de las autoridades mexicanas.