Luka Doncic compareció la madrugada del martes ante los medios de comunicación de forma telemática. El esloveno habló de sus meses de confinamiento en su país y aseguró que la polémica sobre su forma física se debió a una malinterpretación de las palabras de su preparador: “Fue un malentendido, él dijo forma de partido, se refería a cinco contra cinco. Vi todo eso, pero honestamente no importó demasiado. Sé la forma en la que estoy, y sé que es buena”.
El base de los Dallas Mavericks explicó que recibió la asistencia de la embajada estadounidense en Eslovenia para poder viajar a su país al inicio de la pandemia en Estados Unidos, una vez quedó claro que la liga no se iba a reanudar pronto. Estar alejado de la familia preocupaba a Doncic, pero la embajadora Lynda C. Blanchard acudió a su rescate.
“Fue estresante”, recordó el esloveno. “Pasará lo mismo cuando vayamos a Orlando. No voy a ver a mi familia, a mis amigos, durante mucho tiempo”. El base de Dallas comentó que le preocupa la situación del coronavirus, como a todo el mundo.
“Creo que la NBA está haciendo todo lo posible para que nadie se vea afectado. Nos hacen pruebas cada dos días, lo están haciendo muy bien y creo que irá bien”.
El tiempo de reposo le ha servido a Luka para curar su muñeca y tobillo, ambos afectados por pequeñas lesiones antes del parón de la competición. Durante su confinamiento, el esloveno jugó sobretodo a tenis y fútbol, además de levantar pesas para mantener la forma.
Doncic se mostró precavido a la hora de hablar de los objetivos de los Mavericks en la burbuja Disney: “Solo queremos ganar tantos partidos como podamos. Vamos sin presión, a divertirnos, a jugar a baloncesto y esperamos cumplir nuestros objetivos”. Para el esloveno, no habrá ventajas para nadie por el hecho de disputar los encuentros lejos de casa y sin público. Los Mavs siempre han fijado los playoffs como su objetivo prioritario este curso. Lo que venga después será bienvenido.
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