El fin de semana en la NBA ha dado espectáculo por un tubo ahora que los equipos aprietan las tuercas para consolidar sus posiciones en la tabla en el tramo final de competición. En medio de tantos partidos y tantas cosas en juego, dos tiros brillantes pero inválidos fueron protagonistas y cambiaron el signo de dos duelos de altura en la liga. Primero, el sábado, Joel Embiid se quedó junto a los Sixers a un suspiro de forzar la prórroga contra los Celtics. Anoche, Paul George hizo lo propio para intentar evitarla en el Nuggets-Clippers. Ambos tiros desde más allá de medio campo, desde tres cuartos de la cancha, entraron limpios… ¡pero fuera de tiempo!
El final de locura desató la histeria en los fans de Philadelphia, que no se podían creer que el tiro de Embiid no fuera válido. El pívot camerunés lo vio enseguida, y Boston pudo sonreír ante sus rivales en la Conferencia Este con una victoria por 107-110 gracias a un triple de Jayson Tatum a 1,3 segundos del bocinazo definitivo.
Anoche, en la jornada dominical, Paul George tampoco se pudo creer lo cerca que estuvo de valer su canasta para evitar la prórroga en la derrota contra los Denver Nuggets de Nikola Jokic, colosal en el tiempo extra y autor de un nuevo triple-doble victorioso para los líderes de la Conferencia Oeste.