Las emisiones que causan el calentamiento del planeta cayeron un 6,2% en el conjunto del país en 2019, según el Avance del Inventario de Emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) publicado este miércoles por el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico. Para la vicepresidenta cuarta del Gobierno, Teresa Ribera, se trata del “mejor dato de reducción de emisiones de España en un crecimiento de la economía”.La gran novedad del año pasado fue el desplome de la producción eléctrica con centrales de carbón (las más contaminantes), que disminuyó un 64,9%, de acuerdo a las estadísticas difundidas por el Ministerio. No obstante, el inventario de gases de efecto invernadero de todo el país muestra cómo el sector eléctrico no deja de ser solo una parte del conjunto de las emisiones y como el mayor emisor sigue siendo el transporte (por el consumo de derivados del petróleo).“El carbón tampoco es tantísimo de la [energía] primaria”, incide Pedro Linares, profesor de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería ICAI, que asegura que los datos del avance publicado ahora son los esperados. Al igual que la vicepresidenta, este experto destaca que esta reducción se haya producido un año en el que el Producto Interior Bruto (PIB) subió un 2%, lo que supone un desacoplamiento de las emisiones y el crecimiento económico. No obstante, Linares también incide en cómo en 2019 se produjo una bajada del consumo de energía industrial, “que todavía no sabemos explicar por qué, si fue por inversiones en eficiencia o una menor producción”.Según este avance del inventario, las emisiones brutas de CO2 equivalente en el conjunto del país ascendieron a 313,5 millones de toneladas el pasado año, lo que representa una caída de un 6,2% respecto a 2018. Aparte de ocurrir en un contexto económico favorable, el Ministerio también destaca que el año pasado fue un año hidrológico seco, con un descenso del 27,6% de la producción hidráulica.No obstante, al margen de todas variaciones, lo que no cambió en 2019 es que el sector con mayores emisiones volvió a ser el del transporte, con un 29% de las emisiones globales. Los siguientes sectores con mayor peso fueron la industria (20,6%), la generación de electricidad (13,5%), la agricultura y ganadería (12,5%), los sectores residencial, comercial e institucional (8,8%), y los residuos (4,3%).En lo que respecta al sector del transporte, las emisiones incluso subieron el año pasado (+0,7%) debido principalmente a los desplazamientos por carretera (un 26,8% del total de las emisiones del inventario). Las emisiones del transporte aéreo nacional, aunque solo supusieron un 1% del total, aumentaron un 7,4% respecto al año anterior.En cuanto a la generación eléctrica, el desplome de la producción eléctrica con carbón se tradujo en una reducción global del 28,7% de las emisiones en este sector. Si bien las renovables registraron un aumento significativo —la producción de energía eólica aumentó un 9,4%, la solar fotovoltaica un 19% y la solar térmica un 16,8%—, todavía fue mayor el incremento de las plantas eléctricas de ciclo combinado (que emiten CO2), con una subida de la producción de 85,9% respecto a 2018.
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