Hubo un ambiente espectacular en Montilivi. Los seguidores del Girona se volcaron este sábado con los suyos para darles todo su apoyo en su lucha por regresar a Primera ante un Tenerife que también busca el anhelado ascenso y que jugó con el subidón de haber eliminado en ‘semis’ a su archirrival, la UD Las Palmas.
El recibimiento al Girona fue brutal. Nada más bajar del autocar que les transportó a Montilivi, los jugadores rojiblancos chocaron las manos de los hinchas como muestra de agradecimiento. Por su parte, el técnico del cuadro catalán, Míchel Sánchez, se dirigió a la afición levantando los puños al grito de “¡vamos!”.
Homenaje a Xavi Agustí
Los futbolistas del Girona saltaron a un campo lleno hasta la bandera y luciendo brazaletes negros en señal de duelo por la triste desaparición de Xavi Agustí, fallecido esta semana a la edad de 82 años. El minuto de silencio por el que fuera jugador, entrenador y secretario técnico del equipo rojiblanco fue muy emotivo en Montilivi, donde brilló la hermandad entre dos aficiones que convivieron sin ningún problema.
Los 300 seguidores del Tenerife, ubicados en una de las esquinas del Municipal, mostraron, al igual que la parroquia rojiblanca, una exquisita deportividad en este primer asalto de la gran final del ‘play-off’ de ascenso a LaLiga Santander. Aunque los nervios de una final siempre están presentes en este tipo de citas, los aficionados chicharreros dieron la sensación de sentirse cómodos en Montilivi, precisamente el escenario del último ascenso del Tenerife a Primera, el 13 de junio de 2009, gracias a una inolvidable diana del camerunés Dani Kome.
Este sábado, los goles brillaron por su ausencia en un duelo marcado por las precauciones entre dos equipos que llegaban al partido habiendo anotado un total de 126 tantos en todas las competiciones esta temporada: 67 los de Míchel por 59 de los del tarraconense Luis Miguel Ramis.
Cristhian Stuani, que regresó a la titularidad en el Girona, fue la principal referencia ofensiva del cuadro rojiblanco, pero no llegó ni a lanzar un solo remate a puerta en los 79 minutos que estuvo sobre el césped.
El delantero charrúa, ‘pichichi’ de la liga regular empatado con el oviedista Borja Bastón (22), no pudo ver puerta tras anotar un gol decisivo en la anterior eliminatoria ante el Eibar en Ipurua que valió el pase para la final de este ‘play-off’. Este sábado, tras ser sustituido, su afición le despidió con cánticos de “¡uruguayo, uruguayo!”, en un intento de motivarle de cara al duelo de dentro de siete días en Santa Cruz.
El 0-0 en Montilivi deja las espadas en todo lo alto de cara a la vuelta en el Heliodoro. El Girona tratará de poner fin a su maldición en las finales de las promociones de ascenso a Primera tras perder ante Almería (2013), Osasuna (2016), Elche (2020) y Rayo (2021), mientras el que Tenerife intentará regresar 13 años después a la élite del fútbol español coincidiendo con su Centenario.