La defensa legal de los ejidos expresó su inconformidad ante el Juez Sexto de Distrito por presuntos permisos que la Conagua otorgó para continuar con la construcción del acueducto.
Por Estrella Pedroza
Ejidatarios de Ciudad Ayala, Morelos, rechazaron desistirse de los amparos que mantienen suspendida la construcción del acueducto en el Río Cuautla que llevará agua a la termoeléctrica de Huexca.
“Si nos estamos muriendo por la Covid-19, estamos dispuestos a morir por defender nuestra agua”, dijo Juan Rosas Mejía, ejidatario de Tenextepango.
Además, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) informó que debido al conflicto social que existe, “no otorgará los permisos” solicitados.
El pasado 10 de septiembre, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció, en la conferencia conocida como “La Mañanera”, la puesta en marcha de la termoeléctrica de Huexca -situada en el municipio de Yecapixtla y que forma parte del Proyecto Integral Morelos que consta de un gasoducto, un acueducto y una termoeléctrica- debido a que presuntamente no existía ningún impedimento legal para mantenerla cerrada, y se contaba con todos los permisos para concluir los últimos 100 metros del acueducto.
No obstante, dos de los amparos presentados por los ejidatarios de Moyotepec y Tenextepango -situados en el municipio de Ciudad Ayala- promovidos en defensa de la dotación de agua del Río Cuautla (que les fue concedida mediante decreto presidencial), mantienen una suspensión (lo que significa que no se puede realizar nada hasta que la autoridad judicial resuelva el fondo).
Foto: Estrella Pedroza.
“La apuesta, por un lado, de Andrés Manuel Lopez Obrador era que en estos meses (septiembre y octubre) se convenciera a los ejidatarios de desistirse de los amparos y con ello validar la legal construcción del acueducto y con ello ponerla en marcha”, consideró Juan Carlos Flores, asesor legal de los ejidatarios.
Sin embargo, en ambos ejidos – donde la principal actividad es la agricultura- se realizaron asambleas en las que por mayoría de votos se rechazó el desistimiento de los amparos y acordaron mantener el plantón instalado desde el 2015.
“Si se llevan el agua del Río Cuautla a Huexca nos lo van a secar (…) por eso no vamos a dejar que se lleven ni una gota de agua, ayer en asamblea se determinó defender el agua (…)”, destacó este sábado Rosas Mejía durante una conferencia en el plantón de San Pedro Apatlaco.
En tanto, la defensa legal de los ejidos expresó su inconformidad ante el Juez Sexto de Distrito, por presuntos permisos que la Conagua habría otorgado para continuar con la construcción del acueducto.
Ante ello, la autoridad judicial solicitó un informe sobre el incidente por exceso o defecto en el incumplimiento de la suspensión de plano, y Conagua respondió a través del oficio BOO/809/04-291 (con fecha del 5 de octubre) lo siguiente:
“….Debido a que existe un conflicto social derivado del uso del agua en el Sistema de Enfriamiento, toda vez que existen grupos de agricultores que se sienten afectados por el volumen que dejara de descargarse en el río Cuautla, proviene de la planta de tratamiento, y que mientras no se logre un acuerdo al respecto quedará pendiente el otorgamiento de permisos solicitados”.
Foto: Estrella Pedroza.
“Al momento no se han solventado las observaciones técnicas realizadas y persiste el conflicto social, por lo que la dirección técnica del Organismo Cuenca Balsas de la Comisión Nacional del Agua, no ha emitido ningún permiso respecto a del acueducto que llevaría agua de la planta de tratamiento hasta la central termoeléctrica de Huexca. En este sentido el acto reclamado no es cierto toda vez que no se ha autorizado la construcción del acueducto”, señala el documento.
Con ambas acciones, el rechazo de desistimiento de los amparos por parte de los ejidatarios y la respuesta de Conagua, no hay posibilidad legal de que la termoeléctrica pueda entrar en funcionamiento en este 2020, dijo Juan Carlos Flores, también integrante del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra, el Agua y el Aire Morelos, Tlaxcala y Puebla..
“La única manera que existe de que la termoeléctrica funcione es mediante la represión y el uso de la fuerza pública con la Guardia Nacional, pero frente a esa posibilidad los pueblos ya dijeron están dispuestos a defender con todo el agua y su territorio, como lo hizo Samir Flores Soveranes, principal opositor a la termoeléctrica de Huexca que fue asesinado en febrero de 2019.