En Junts per Catalunya no ha sentado bien el preacuerdo entre ERC y la CUP, anunciado el pasado domingo. Sin embargo, su portavoz, Elsa Artadi, ha dicho este lunes que mantienen la voluntad de seguir negociando “hasta último minuto, las 24 horas del día” para alcanzar un pacto que incluya a los 74 diputados independentistas. La diputada, sin embargo, ha recordado que el propio presidenciable de los republicanos, Pere Aragonès, había abogado por una mayoría que diera largo alcance a la legislatura y que incluyera los Presupuestos. “No hay nada de ello en lo que hemos leído en los medios de comunicación”, ha dicho. “No queremos un Govern inestable, de peleas, un Vietnam”, ha rematado.
Aragonès no tiene asegurado el voto de Junts para el debate del viernes –Laura Borràs tendrá que convocar la sesión de investidura pues el líder de ERC es el diputado que de momento reúne más adhesiones– y sin el apoyo de los de Carles Puigdemont peligra la elección de un president independentista. La portavoz de los republicanos, Marta Vilalta, no ha querido aclarar si contemplan un posible Govern en minoría (ERC y la CUP suman 42 escaños) pero también ha insistido en que su apuesta es un “Ejecutivo amplio”. “Estamos seguros de que cerraremos este acuerdo. Tenemos matices distintos, pero saldremos adelante”, ha asegurado.
Los tres partidos tienen reuniones esta tarde –no aclararon si serán a tres bandas– y el foco cae en lo que hará Junts. Sus 32 votos son indispensables para que la investidura salga adelante el viernes y no participar en el preacuerdo de las dos formaciones de izquierdas les dejaría como los culpables de romper la unidad independentista y malgastar el resultado de las pasadas elecciones del 14-F, en las que las opciones secesionistas superaron por primera vez el 50% de voto. Artadi ha rechazado que su formación “esté siendo presionada” por sus posibles socios. “Solo nos sentimos presionados por darle estabilidad a esta legislatura”, ha dicho.
Los republicanos han descartado hacer público el documento del preacuerdo “por respeto” tanto a sus bases, como a las de la CUP. Los anticapitalistas esperan tener el veredicto de sus asambleas el próximo jueves. Según la nota de prensa difundida por ERC el domingo, hay acuerdos en medidas contra la “emergencia habitacional”, refuerzo de la atención primaria, supeditar el uso de los proyectiles de espuma prensada a que los Mossos publiquen los protocolos sobre su uso por los antidisturbios, y la preparación de un nuevo “embate democrático” a favor de la independencia, posiblemente un nuevo referéndum. Vilalta no ha querido concretar el alcance de estos puntos y ha aceptado que en algunos casos la concreción “llegará a posteriori”.
La CUP admite que todavía quedan algunos flecos del preacuerdo y confía en remitirlo a sus bases en las próximas horas, según ha revelado la diputada Eulàlia Reguant en TV3. La anticapitalista ha explicado que el documento que harán llegar a sus militantes recogerá la respuesta de ERC a sus reivindicaciones y que serán sus bases quienes decidirán si apoyan, se abstienen o votan en contra de una eventual investidura. El diputado Xavier Pellicer ha matizado que el pacto con ERC recoge más puntos que los que han trascendido, pero que prefieren no hacerlos públicos para ser “pulcros” y no distorsionar el debate con las bases.
”Queremos sentar las bases del rescate social y una salida de la crisis por la izquierda y un modelo de país que genere más soberanía más allá de corsés legales y autonómicos”, ha señalado Pellicer. Los dos diputados anticapitalistas han criticado que Junts aún no haya dado respuesta a sus reivindicaciones tres semanas después de haberles enviado una propuesta. “Tienen que decidir si quieren hablar o no de rescate social o de las bases de un nuevo país y de soberanía en clave económica o productiva”, ha afirmado Reguant, que ha dicho que está fuera del debate si deben entrar o no en el Gobierno. “No estamos hablando ni de sillas ni de consellerias. Estamos hablando de marco político de la legislatura”, ha manifestado.
La relación entre las dos formaciones es gélida: Pellicer sostiene que no quieren volver a vivir situaciones “surrealistas” como la de la constitución de la Mesa al “límite” ni tienen intención de apoyar un cambio en el reglamento del Parlament para evitar que Laura Borràs tenga que dejar el cargo si se le abre el juicio oral. “El artículo del reglamento está hecho para políticos perseguidos políticamente. No creemos que se tenga que modificar”, ha afirmado.
Tanto Junts como ERC han evitado aclarar qué les separa en las conversaciones. Vilalta, sin embargo, sí ha asegurado que abogan por “reformular” el llamado Consell de la República que pilotan los eurodiputados Carles Puigdemont y Toni Comín desde Bruselas. El alcance de la hoja de ruta independentista es muy difícil de acordar con estrategias tan contrapuestas sobre el diálogo o la acción exterior. Más pistas seguramente dará este martes el secretario general de Junts, Jordi Sànchez, que ofrecerá una conferencia política para dibujar cómo concibe la legislatura.
Laura Borràs, la presidenta del Parlament, ha anunciado que este martes comenzará su ronda de contactos con los grupos para buscar un candidato. Dará inicio con los grupos pequeños (PP y Ciudadanos), pero la incógnita es si la CUP llegará a tiempo para tener la respuesta de sus bases y proponer a Aragonès. El pleno, por ley, tiene que comenzar a celebrarse este viernes.
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