Arkadiusz Milik sigue apartado en el Nápoles a la espera de que su situación se resuelva en el mercado invernal en forma de salida del club italiano. Su contrato acaba en junio y su negativa a renovar hace unos meses provocó que el presidente De Laurentiis tomase la decisión de apartarle del grupo. No está inscrito para ninguna competición.
El Atlético de Madrid ya pensó en el polaco el pasado verano y ahora podría volver a la carga para reforzar la delantera siempre y cuando la operación fuese muy ventajosa, es decir, que no sea cara. Y a pesar de que en junio será libre para marcharse a cualquier equipo, y que el Nápoles no ingresaría un solo euro, el dirigente tiene claro que no lo va a regalar. En cualquier caso, su representante se encuentra en Italia para tratar de desbloquear la situación.
Así, De Laurentiis pide entre 15 y 18 millones de euros para dejarle marchar, una cantidad que nadie está dispuesto a pagar en estos momentos cuando, en unos meses, llegaría libre. Pero tozudo como es, el presidente napolitano no tiene la más mínima intención de dar su brazo a torcer, a riesgo de perder mucho dinero.
La Juventus es el otro equipo que está interesado en Milik. Pero en lugar de ofrecer dinero proponen un trueque con Bernardeschi. Una opción que sí contemplan en Nápoles, donde en estos momentos piensan que lo más probable es que el delantero agote su contrato.
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