Aunque estaba en su último año de mandato, Josep Maria Bartomeu contrató a Ronald Koeman como entrenador del Barcelona por dos temporadas. Lo mismo había pactado con Quique Setién, que también había firmado hasta junio de 2022. Los precandidatos a la presidencia del Barça no miran con recelo al holandés. En principio, todos se mostraron a favor de su continuidad a excepción de Víctor Font. “Koeman no seguiría con nosotros, aunque gane todo; hemos elegido a Xavi Hernández”, advirtió. Tiempo después reculó. A pesar de que el Barcelona suma uno de los últimos nueve puntos en LaLiga, ha ganado sus dos partidos en la Champions y, por ahora, las sensaciones son buenas. “Si se mantiene una dinámica positiva de juego y resultados, el proyecto liderado por Xavi confiaría en la continuidad en el cargo de Koeman y sus ayudantes”, dijo Font. Koeman, sin embargo, regatea la política, después de que Bartomeu renunciara a su cargo el pasado martes.
“No está en mis manos. Soy entrenador de este club y trabajo al máximo para sacar el equipo adelante, conseguir buenos resultados y ganar títulos. Eso es lo que tienen que hacer el entrenador y los jugadores. Ya se verán los cambios. No estoy nervioso. Estoy metido en mi trabajo. A partir de hoy hasta las elecciones hay candidatos que hablarán y que contarán sus proyectos. Ya veremos quién será el presidente en el futuro. No me gusta hablar individualmente de los candidatos. Mi trabajo no es para estar contento o descontento si alguien quiere cambiar cosas o no”, subrayó el técnico azulgrana en la previa del duelo de este sábado ante el Alavés (21.00, Partidazo). “Cualquier partido puede complicarse, nos interesa sobre todo el ritmo de balón, si es alto encontraremos espacios y sabemos que en este momento en Liga necesitamos los puntos”, analizó Koeman.
“Se nota que el equipo cada vez va a más. El otro día fue un partido completo, aunque fallamos bastante delante de portería. Pero hemos buscado más los espacios y podemos realizar cambios porque tenemos más de once jugadores”, dijo el técnico, que dejó fuera de la convocatoria a Riqui Puig (solo ha jugado tres minutos). “Es una decisión técnica. En varios partidos, a principio de temporada, hemos llevado a 23 jugadores. Y, para mí, son demasiados. Lo mejor es viajar con 20 o 21 futbolistas como máximo. Prefiero que haya jugadores que hayan hecho un entrenamiento muy intenso por si les necesito que estén en plena forma para jugar”, sostuvo.
Y aprovechó para valorar a Dembélé. “Es creativo, tiene mucha velocidad y el equipo necesita gente que se vaya en el uno contra uno porque crea espacios y no perder balones en zonas del campo que no son importantes. Puede mejorar. Para él es importante que está físicamente bien”, dijo Koeman, que también destacó a Griezmann. El francés todavía no ha marcado en los seis partidos que ha jugado en la temporada. “No tengo ninguna queja con Antoine. En los entrenamientos lo da todo, ojalá tengamos un poco de suerte con él. Le iría bien marcar para estar más tranquilos”, cerró el técnico del Barcelona.