El Alavés continúa activando la Operación Nostalgia. Tras incorporar a Víctor Camarasa, que ya disfruta de galones con Asier Garitano en su segunda etapa albiazul, quiere ahora incorporar a Edgar Méndez, extremo que también formó parte del equipo que, entrenado por Mauricio Pellegrino, fue finalista de Copa en la temporada 16-17.
Con su elección, Sergio Fernández pretende volver a contar con un futbolista que ya conoce a la perfección el club babazorro. El canario ofreció un excelente rendimiento en su primera etapa en Vitoria-Gasteiz y, junto a Deyverson -ahora en el Getafe-, fue el máximo goleador del equipo en el curso 16-17.
Aunque otros clubes de LaLiga, entre ellos el Leganés, también se han interesado en el jugador, el Alavés tiene avanzadas las negociaciones con el Cruz Azul y el futbolista, al que le gustaría regresar a Mendizorrotza para volver a contar con minutos de juego.
Gol histórico
En los últimos meses, el ex babazorro apenas ha entrado en los planes de Robert Siboldi, entrenador del Cruz Azul que no cuenta con él para el recién iniciado Torneo de Clausura mexicano.
Desde octubre hasta enero sólo ha disputado 84 minutos, divididos en tres encuentros. En octubre sólo jugó un minuto de competición oficial, en noviembre 82 minutos y el 26 de enero tuvo su última aparición con el equipo azteca al actuar un minuto en un encuentro del Torneo de Clausura.
Por ello, Edgar Méndez, que cumplió 30 años en enero, ansía regresar a LaLiga española, donde ha logrado sus principales éxitos. En la temporada 16-17 fue indiscutible con Mauricio Pellegrino. Marcó ocho goles, cuatro en liga y otros cuatro en Copa, y jugó 1.932 minutos divididos en 33 encuentros -27 de Liga y seis de Copa-. El 8 de febrero de 2017 fue el autor del histórico gol en la semifinal frente al Celta que clasificó al Alavés para la final copera.
Con Fejsa, un paso más
Mientras, la entidad alavesista ha presentado hoy a
Ljubomir Fejsa
, cuarto fichaje en este mercado invernal que llega cedido por el Benfica hasta final de temporada sin opción de compra.
El director deportivo babazorro, Sergio Fernández, ha explicado que su incorporación ayuda al Alavés a “dar un paso más”. “Nos va a equilibrar. No es Tomás Pina, pero nos va a ayudar muchísimo ante las carencias que mostrábamos”, ha destacado. “En defensa tiene un gen competitivo tremendo y el criterio suficiente para canalizar el balón de manera fluida”, ha explicado.
Por su parte, el mediocentro serbio quiere olvidar las lesiones sufridas en esta campaña y se siente preparado para “entrenar y jugar”. “Quería cambiar, buscar un club donde poder jugar y crecer”, ha trasladado. En su cuerpo luce tatuado el lema ‘No soy un superviviente, soy un guerrero’. “Antes tenía muchas lesiones y el tatuaje me hace más fuerte”, ha señalado.
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