El Alavés reacciona a tiempo y se lleva el derbi ante el Eibar

No pudo cerrar mejor su año el Alavés en casa: remontada, tres puntos y todo ante un rival directo, el Eibar, que empezó muy bien pero se desinfló. Y es que lo cierto es que el conjunto vitoriano no entró en el partido hasta pasada la media hora pero, cuando lo hizo, se quedó con el balón, los goles y unos puntos que le permiten respirar un poco más.

Eibar dominador, Alavés desconocido

Como buen derbi vasco que era, al Alavés – Eibar no le faltó ningún detalle de la tierra. La noche sirvió un tiempo frío, pasado por agua, que los jugadores pronto se encargaron de aclimatarlo con goles. El primero en hacerlo, Pedro León.

Alavés-Eibar, en imágenes

Pasan los años y el murciano no pierde el toque. Lo sacó a relucir con un lanzamiento de córner tan cerrado que Pacheco acabó por metérselo en su propia portería. Gol poco ortodoxo del Eibar pero efectivo. Y tempranero.

A partir de entonces los visitantes, que apenas habían podido demostrar su superioridad, lo hicieron con más ocasiones claras. Les faltó convertirlas en gol, eso sí, y lo acabarían pagando. Pero no de inmediato, pues durante más de media hora, los de Mendilíbar fueron los dueños del partido. El Alavés perseguía sombras hasta que se encontró con una remontada. Cuestión más de acierto que de suerte.

Primero Édgar en una contra relámpago bien resuelta y luego Deyverson tras una gran descarga de Joselu, dieron la vuelta en el marcador dejando a los armeros con el molde antes de su paso por vestuarios.

Poco juego y menos ocasiones

En la segunda parte, el partido fue hacia abajo. Se cayó. En intensidad, en ocasiones y, por su puesto, en goles. Después de una primera mitad con muchos capítulos, la segunda fue más bien un libro en blanco.

El Eibar no le impregnó a su juego ese carácter habitual al que acostumbra y el Alavés, muy cómodo, incluso se permitió el lujo de no cerrar el partido pese a tener el tercer gol en las botas de Luis Rioja. Así las cosas, los de Machín que se llevaron el derbi después de entrar con muy mal pie, arreglarlo todo deprisa y corriendo pero con buena letra y viviendo una segunda parte muy plácida. Cerrarán el año no muy lejos de casa, en Pamplona en Osasuna, mientras que al Eibar le tocará visitar el Camp Nou en un momento además nada sencillo.

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