El Almería ‘post Sadiq’ no carbura y Osasuna se mete en Champions

Osasuna sigue con brillante inicio de campaña. Después de lograr un pleno de victorias en El Sadar, los de Jagoba Arrasate buscaban su primer triunfo del curso a domicilio. Y éste llegó, gracias a un solitario gol del Chimy Ávila, en Almería, donde se impusieron (0-1) a un conjunto local que desde el fichaje del infortunado Umar Sadiq por la Real Sociedad cuenta sus partidos por derrotas.

Rubi, que después de la salida del nigeriano -en la derrota (1-0) ante el Valladolid– ya pasó a defensa de cuatro, repitió sistema entrando en el once Eguaras, que volvía después de lesión, y Embarba, en su primera titularidad con los almerienses. Arrasate, por su parte, apostó de inicio por Rubén García en lugar de la revelación Aimar Oroz, tocado, y Brasanac, quedándose en el banquillo Moncayola.

Tercer gol del Chimy Ávila

Empezó mejor el Almería, con Pozo y Akieme dándole amplitud a los suyos, pero con el paso de los minutos Osasuna fue cogiéndole el pulso al partido y, en el 28’, apareció el Chimy Ávila para poner el 0-1 en el luminoso del Power Horse Stadium y sumar así su tercer tanto del curso. Moi Gómez llegó a línea de fondo, tocó Pozo, peinó Rubén García y el ‘Comandante’ no dio ninguna opción a Fernando, que solo unos segundos después iba a ver, aliviado, como Budimir, a portería vacía, remataba arriba una nueva incursión de Moi por la izquierda. No reaccionaban los rojiblancos, que se volvieron a salvar al impactar en el poste una volea con la izquierda de Lucas Torró. No falló, en el tiempo extra, Rubén García, pero tras revisar la acción en el VAR Medié Jiménez entendió que el ‘Joker’ se había ayudado del brazo para hacer el 0-2.

El Bilal cambia la energía 

Eguaras y Embarba, que tuvo la más clara del primer tiempo para el Almería con un derechazo que se marchó alto, no regresaron tras el paso por vestuarios, ingresando al terreno de juego Portillo y Puigmal. Aunque si hubo una entrada que cambió la energía del encuentro esa fue la de El Bilal Touré. El llamado a ser el sucesor de Sadiq encendió a la gente y se entendió bien con el que debe ser su nuevo compañero de fechorías, el veloz Ramazani, pero sin llegar a concretar unas oportunidades que seguían cayendo por el lado rojillo. Hasta en dos ocasiones se impuso Fernando al Chimy en el mano a mano, dejando inmóvil un marcador que mete a Osasuna en zona Champions, con 12 puntos de 15 posibles.