El Andorra perdona al colista Málaga

El Andorra alcanzó en La Rosaleda su sexta jornada consecutiva sin perder después de sumar tres victorias y tres empates que ha ido alternando de forma sucesiva. Este domingo firmó una igualada sin goles ante el colista Málaga, al que los de Eder Sarabia le perdonaron la vida en una segunda parte de neta superioridad pirenaica.

Los andorranos trataron de llevar el peso del partido y, pese a hacerse con la posesión del balón, no generaron peligro al igual que el Málaga en una primera mitad de máxima igualdad. El 4-3-3 de Eder Sarabia no le complicó demasiado la vida a un equipo andaluz nada cómodo sobre el césped. Los de Pepe Mel estuvieron espesos en la circulación de la pelota ante los pirenaicos, muy bien plantados desde el inicio.

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Apenas hubo ocasiones en ambas áreas. De hecho sólo se vieron dos remates fallados, el primero del local N’Diaye en el 30′ y diez minutos después del visitante Adrià Altimira. No hubo ni un chut entre los tres palos por parte del Málaga y el Andorra en la primera parte, lo que llevó al aburrimiento generalizado en unas gradas que congregaron a algo más de 16.000 espectadores en La Rosaleda. 

Tras el descanso, los andaluces salieron con intensidad y a punto estuvieron de adelantarse en el marcador en una acción que inició Javi Jiménez con un potentísimo saque de banda al punto de penalti que acabó con un testarazo de Esteban Burgos, al que respondió el meta Raúl Lizoain con un paradón sobre la misma línea de gol en la primera gran ocasión del partido.

El Andorra, sin embargo, replicó de inmediato con dos grandes oportunidades en las que perdonó. En el 60′, Sinan Bakis echó el balón fuera después de un monumental error defensivo del cuadro costasoleño. Apenas dos minutos después, el meta Manolo Reina evitó con una mano milagrosa el tanto de Germán Valera en otro vertiginoso ataque de los del Principat.

Expulsión de Pastor en el 85′

Un nueva pérdida de balón del Málaga terminó con otra inmejorable ocasión de Bakis que neutralizó un inspiradísimo Manolo Reina en el minuto 69. El veterano guardameta sostuvo a su equipo ante un Andorra vertical, ambicioso y muy superior sobre el terreno de juego, aunque a falta de cinco minutos para el final el cuadro visitante se quedó en inferioridad numérica tras ser expulsado Álex Pastor por una falta al borde del área sobre Rubén Castro, que se iba solo hacia portería.  El colegiado hizo caso al VAR y, tras revisar la acción en el monitor de campo, mostró la roja al lateral del Andorra.

Al final, el monólogo futbolístico del conjunto de Eder Sarabia en la segunda parte no pudo traducirse en una victoria que mereció por juego y ocasiones ante un Málaga lento e inoperante. El punto permite a los pirenaicos asomarse a los puestos de play-off de ascenso, mientras que a los andaluces no les saca del ‘pozo’.