O mejora pronto sus prestaciones en defensa o este Fulham descenderá cuando resten todavía muchas jornadas de la Premier League por jugarse. El conjunto dirigido por Scott Parker encajó este lunes una nueva derrota, la tercera tras tres jornadas disputadas en su regreso a la máxima categoría del fútbol inglés. En esta ocasión frente a un Aston Villa en el que Grealish y compañía se gustaron y, sin hacer nada del otro jueves, superaron a los de Craven Cottage con claridad (0-3). El exmadridista Areola fue quien encajó los tantos, pero el serio problema que tiene atrás el Fulham no trata de nombres sino de un déficit colectivo. 10 tantos ha encajado ya promediando más de 3 por partido en un inicio de campeonato para olvidar.
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Para ser justos, cabe puntualizar que el encuentro no fue ni mucho menos un monólogo del Aston Villa. De hecho, el Fulham dominó en cuanto a posesión de balón e incluso se podría decir que hizo méritos como para, cuanto menos, haber propiciado un tanteo más equilibrado. Pero cuando el balón merodeo por su área, lo hizo amenazado con llegar o directamente llegando a la red.
Ni cuatro minutos hubo que esperar para que esto último sucediera por primera vez. McGinn detectó el desmarque entre líneas de Grealish y éste se metió hasta la cocina para superar de primeras a Areola. 0-1 a las primeras de cambio. ¿Suficiente como para espabilar al Fulham? Para nada. En el 15’ su defensa volvió a hacer aguas, y en esta ocasión ‘Mr.Carisma’ Grealish no marcó, pero sí protagonizó por el costado izquierdo la jugada que acabó con el balón en los pies de Hourihane, que desde dentro del área encontró la red.
Con ese 0-2 se llegó al descanso, y lejos de que éste dotase al Fulham de concentración o el ímpetu necesario para remontar, lo que aconteció fue que en el 48’ su defensa volvió a quedar retratada. Falta lateral colgada desde la izquierda por Hourihane y Tyrone
Mings, completamente libre de marca, fusiló a Areola estando a apenas cinco metros de portería. Indigno de la Premier League.
Con lo comentado hubo suficiente para determinar que este Fulham tiene mucho que mejorar. Está a tiempo, porque el campeonato es largo, pero en estos momentos tiene muy mala pinta. El Aston Villa, por su parte, ha ganado los dos partidos que ha disputado en esta Premier y todavía mantiene su portería a cero. Desde luego que los de Dean Smith no quieren pasar tantos apuros para salvarse como los experimentados hace unos meses.
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