El Athletic suma tres puntos para celebrar

Cuatro puntos en dos partidos consecutivos en casa, un gol a favor y cero en contra. Los números del Athletic en este arranque de Liga son los que son. Las sensaciones que transmite el equipo, sin embargo, poco o nada tienen que ver con los propios resultados.

Los leones, a modo y manera del pasado lunes frente al Mallorca, merecieron más ayer ante el Valencia. La victoria ante el conjunto che fue justa, pero el marcador se quedó corto. ¡Y menos mal que Marcos André, en la última acción del choque, remató fuera con todo a su favor para batir a Unai Simón tras un auténtico jugadón personal dentro del área bilbaína!

Es lo que tiene andar con fuego. Al menor descuido, te quemas. Esta vez, sin embargo, la suerte o el desacierto rival se alió con los rojiblancos en este lance que pudo costar dos puntos. A los leones, en cualquier caso, les sigue penalizando su falta de pegada.

Berenguer, que en el arranque del choque pudo haber abierto el marcador, acabó acertando en la diana al borde del descanso. Mamardashvili, que el año pasado amargó la Copa a los leones, no anduvo fino esta vez en su estirada. San Mamés, por cierto, apretó como en las grandes ocasiones.

Nico Williams por Villalibre

Valverde afrontó este segundo encuentro consecutivo en casa con prácticamente el mismo once que presentó a primeros de semana frente al Mallorca. El técnico gasteiztarra solo hizo un cambio. Nico Williams entró por Villalibre, circunstancia que obligó a su hermano Iñaki a ejercer de delantero centro. Gattuso también realizó una única variación en su alineación respecto al equipo que venía de ganar al Girona. Variación obligada porque Comert, uno de sus centrales, vio la roja en la jornada inaugural. Gabriel Paulista ejerció en su lugar.

El Athletic, a modo y manera de lo vivido en su estreno de la temporada, arrancó con brío ante un rival situado con un 1-4-3-3 que, en función del poseedor del balón, se convertía en un 1-4-5-1 a la hora de contener. Muniain, Berenguer y Sancet dispusieron de buenas opciones antes del minutos seis.

Los visitantes, una vez capeado el temporal sin recibir daño alguno, empezaron a estirarse en ataque. Castillejo, poco después de que Maxi Gómez entrase por el lesionado Hugo Duro, perdonó lo imperdonable ante Unai Simón. Las alternativas en torno a una y otra área fueron constantes hasta que en la recta final del primer tiempo los leones dieron otro arreón.

Arreón sumamente productivo, puesto que Berenguer abrió el marcador a tres minutos del descanso. Iñaki Williams recuperó el balón, Vesga vio el hueco y el navarro acertó con la zurda. Mamardashvili no estuvo fino.

Susto morrocotudo

El Athletic también tuvo un arranque brioso en la segunda mitad. Muniain lo intentó desde fuera del área tras una buena contra. El Valencia, a remolque en el marcador, dio un pase hacia delante, con la banda derecha como principal arma. Thierry hizo una gran internada que no encontró rematador y Castillejo remató fuera por poco.

Los entrenadores, en tal tesitura, empezaron a tirar de banquillo. Lato y Nico fueron las primeras apuestas de Gattuso. Valverde respondió primero con Zarraga y después de Vencedor y Raúl García. La incorporación simultánea de Foulquier y Marcos André cerró el capítulo de cambios.

Los locales salieron reforzados con este carrusel de relevos en poco menos de un cuarto de hora. La incertidumbre en el marcador se mantenía. El Valencia iba ya con todo y los leones buscaban la sentencia. Valverde, consciente del peligro, optó por tirar de Capa y Morcillo. Marcos André la tuvo para empatar, pero no concretó y acto seguido el árbitro pitó el final.