Después de caer ante el Maccabi de Tel Aviv en la prórroga (99-94), el Barça tiene este viernes (19.45 horas) contra el Fenerbahce Beko en Estambul la segunda oportunidad para asegurarse matemáticamente el liderato de la Euroliga.
El conjunto azulgrana tiene suficiente con un triunfo en las últimas dos jornadas para afrontar los ‘play-off’ con la ventaja que da la primera posición.
El martes, en Tel Aviv, tuvo la primera oportunidad ante un rival que, pese a no jugarse nada, planteó un encuentro físico que incomodó a los de Sarunas Jasikevicius.
Sin embargo, el equipo catalán compitió hasta el final, forzando una prórroga que se decidió por una controvertida decisión de los árbitros. A once segundos para el final y con el partido empatado (94-94) pitaron una falta técnica a Nikola Mirotic por no respetar la distancia en un saque de banda.
De esta manera, el Barça firmó la tercera derrota en los 29 duelos disputados en lo que va de 2021. Todas ellas las ha sufrido en la Euroliga ante rivales que plantearon un partido físico.
En los tropiezos contra el Anadolu Efes, el ASVEL Villeurbanne y el Maccabi, el líder de la Euroliga tampoco fue capaz de controlar el ritmo del choque a través de la solidez defensiva, su principal virtud.
El Barça llega a Turquía procedente de Israel con toda la plantilla al completo a excepción de Pau Gasol, que sigue con su plan para debutar con el primer equipo.
Una de las novedades en Tel Aviv, fue la presencia de Cory Higgins, ausente en las últimas semanas por molestias en el pie izquierdo.
El alero estadounidense es uno de los puntales en el esquema de Jasikevicius y así lo demostró en el día de su reaparición con 20 puntos y con protagonismo en momentos decisivos del partido.
Enfrente el Barça tendrá un rival ya clasificado para las eliminatorias al título y que en las últimas dos jornadas tiene la misión de acabar la fase regular entre los cuatro primeros.
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