El gran trabajo realizado por el FC Barcelona con el fútbol femenino desde su profesionalización en 2015 no solo está dando sus frutos en el primer equipo sino que además el filial está ofreciendo un gran nivel y seguirá un año más en la segunda categoría del fútbol español tras una magnífica temporada y un final de infarto.
El equipo dirigido por Óscar Belis y Pol Grau perdió en la última jornada ante el Zaragoza (2-1) pero aprovechó el empate del Deportivo ante el Atlético (2-2) para evitar el playoff de descenso y asegurar la plaza para el curso que viene. Lo taquicárdico de la situación fue que el Barça B acabó por encima del Deportivo gracias al total de goles marcados. Catalanas y gallegas acabaron igualadas a puntos (51), en el ‘goal-average’ particular y en diferencia de goles (+20), por lo que la clasificación tuvo que regirse por los goles a favor, con 52 de las azulgrana por 49 de las coruñesas.
Se trata de una gran generación de futbolistas, muchas de ellas con presencia ya en el primer equipo de Jonatan Giráldez y que han despertado el interés de algunos equipos ya de la Primera Iberdrola.
María Molina, Esther Laborde, Martina Fernández, María Pérez, Julia Bartel, Ornella Vignolla y Ona Baradad han debutado ya con el primer equipo, mientras que la portera Meritxell Muñoz no ha debutado pero sí está en dinámica de primer equipo tras la lesión de Cata Coll.