El Barça tiene este martes (20.30 horas) ante el Movistar
Estudiantes, un rival de la zona baja de la clasificación, una nueva oportunidad para aumentar a catorce la racha de victorias consecutivas en la Liga Endesa. El partido aplazado correspondiente a la vigésima jornada llega en el mejor momento de la temporada para el conjunto catalán, segundo clasificado a dos victorias del Real Madrid.
La última derrota del equipo azulgrana en la ACB se remonta al 1 de diciembre de 2020, cuando el Valencia Basket puso en apuros la sólida defensa azulgrana en el Palau Blaugrana (90-100).
Desde entonces, el Barça encadena trece triunfos consecutivos en la competición doméstica, el último de ellos precisamente contra su último verdugo liguero.
En Valencia, el Barça volvió a dar una lección defensiva, una constante en lo que va de 2021. De hecho, en los 25 partidos que el equipo azulgrana ha disputado desde enero entre la Liga Endesa, la Copa del Rey y la Euroliga ha encajado una media de 71,1 puntos.
Cifras que le han permitido levantar la Copa, seguir la estela del Real
Madrid en la competición doméstica y liderar con mano de hierro en Europa.
Prueba de ello es que en 2021 los pupilos de Jasikevicius solo han perdido 2 de los 25 encuentros disputados, ambos en la Euroliga contra el Anadolu Efes y el ASVEL Villeurbanne.
Contra el conjunto madrileño el Barça arrastra la baja de Cory
Higgins, con molestias en el pie izquierdo, mientras que Pau Gasol sigue con su puesta a punto para debutar.
Teniendo en cuenta la posición en la tabla del rival -el Estudiantes ha sumado 8 victorias en 25 partidos- y la proximidad del duelo de Euroliga contra el Alba de Berlín, se espera que Jasikevicius apueste por dar más minutos a jugadores de la segunda unidad.
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