Barça y Zalgiris Kaunas se citan este viernes (20:00 horas, retransmitido por DAZN) en el segundo partido del playoff de cuartos de final de la Euroliga, de nuevo en el Palau y con un 1-0 para los azulgrana, que se mostraron superiores en el primer envite de la eliminatoria (91-69). Desde las filas del combinado barcelonista se ha insistido mucho en las últimas horas sobre el peligro de caer en una cierta relajación mental, es decir, de pensar que el trabajo ya está hecho. “Todos queremos ganar este partido e ir a Lituania con un 2-0, pero hay que ir paso a paso y sobre todo hacer mucho trabajo mental con uno mismo antes del partido. La parte mental es la más importante”, apuntó el técnico del Barça, Sarunas Jasikevicius, quien resumió el tema diciendo que “estamos contentos por empezar la serie bien, pero ganes de 25 o de 1, vamos 1-0 y nada más”.
El Barça se ha encontrado en esta situación, la de abrir la eliminatoria de cuartos con victoria (1-0), en siete ocasiones desde que el cruce pasó a ser al mejor de cinco partidos en la temporada 2008-2009. De esas siete veces, en cinco los azulgrana acabaron llegando a la Final Four.
Al margen de cómo se tomará mentalmente el Barça este segundo encuentro, se espera que el Zalgiris también ofrezca una mejor versión con respecto a ese primer duelo. El combinado lituano, por ejemplo, permitió 13 rebotes ofensivos de su oponente, erró de los 13 triples que lanzó y sólo dio 6 asistencias. “No creo que la diferencia entre el Zalgiris y el Barça sea de más de 20 puntos –indicó el alero azulgrana Alex Abrines–. Sabemos que saldrán más agresivos y con más intensidad, como mínimo tendremos que igualarla. Cada uno tiene que hacer un ejercicio interior de pensar que vale lo mismo ganar de 20 que de 1. La serie está 1-0, pero aún tenemos la presión”. El Zalgiris, de hecho, ya lo avisó nada más acabar el primer encuentro, cuando su entrenador, Kazys Maksvytis, afirmó que su equipo había “perdido una batalla, pero no la guerra”. “Espero una reacción del Zalgiris, con un juego más físico y de “mucho contacto, pero hemos de ser nosotros los que impongamos nuestro estilo”, advirtió Jasikevicius.
Un aspecto importante es el de los jugadores ‘tocados’. El Barça tiene a Cory Higgins de baja por una lumbalgia, pero seguramente pesa más el mal estado de forma del base Isaiah Taylor, quien sale de una lesión y sólo jugó 6 minutos (2 puntos) en el primer choque, así como las ausencias de Keenan Evans y de Tyler Cavanaugh.
Un dato que muestra el elevado nivel de concentración del Barça en el primer partido de la serie es que metió los 21 tiros libres que lanzó. No erró ninguno, lo cual supone un récord histórico en la historia del playoff de la máxima liga europea. Ese es el estadio mental que el conjunto azulgrana se auto exige para este segundo duelo.