Tres días después de derrotarlo en la final de la LLiga Catalana ACB (82-92), el Barça se enfrentará al Joventut Badalona de nuevo este sábado (21:30 horas) en la semifinal de la Supercopa Endesa, que se disputará este fin de semana en el Palacio Municipal de Deportes San Pablo de Sevilla.
El conjunto azulgrana no gana la competición desde 2015, cuando se impuso en la final al anfitrión, el Unicaja. La historia reciente no sonríe al cuadro catalán, que ha perdido las últimas tres finales contra el Real Madrid y, en paralelo, su dominio en el palmarés de la Supercopa, con ocho entorchados para los blancos por seis del Barça.
El entrenador del conjunto azulgrana, Sarunas Jasikevicius, ha insistido en que el equipo se encuentra lejos de mejor versión, puesto que sus siete internacionales (los recién llegados Tomas Satoransky, Mike Tobey, Jan Vesely y Nikola Kalinic, además de Rokas Jokubaitis, Sertac Sanli y Nico Laprovittola) se unieron a la pretemporada entre el jueves y el viernes pasado.
“Siempre es mejor aprender ganando, pero todavía estamos lejos de dónde queremos estar. Somos realistas, es un proceso lógico”, valoró el técnico lituano este miércoles, después de levantar la Lliga Catalana con sendas victorias ante el Bàsquet Girona en la semifinal (88-77) y el Joventut en el partido por el título (82-92).
Kalinic demostró carácter y fiabilidad al anotar 11 de sus 17 puntos en el último cuarto de la final, una solvente actuación coral por parte de los de Jasikevicius, aunque con papel destacado para los exteriores Álex Abrines (12), Kyle Kuric (11) y Laprovittola (12 puntos), elegido MVP del partido.
El trío interior formado por Simon Birgander, Ante Tomic y Henry Ellenson firmó 47 de los 77 puntos del Joventut, un aspecto que el Barça deberá mejorar en la Supercopa Endesa, sin desatender al cañonero Kyle Guy, al que entonces sí pudieron atar en corto.
El único precedente entre azulgranas y verdinegros en la competición data de 1987, cuando el conjunto barcelonista se impuso (91-88) impulsado por los 23 puntos de Juan Antonio San Epifanio ‘Epi’.
Antes de la Lliga Catalana, el Barça disputó dos amistosos a puerta cerrada (victoria ante el MoraBanc Andorra, 87-80, y derrota frente al Partizan, 75-81) con la presencia de los seis jugadores del primer equipo que arrancaron la temporada el 28 de agosto: Abrines, Kuric, Cory Higgins, Sergi Martínez, y dos de los nuevos fichajes, Oriol Paulí y Oscar da Silva.
Jasikevicius tendrá la única baja confirmada de Nikola Mirotic, que se perderá el tramo inicial de la temporada por una lesión en el tendón de Aquiles del pie izquierdo.