Una vez concretado el relevo en el banquillo, con la llegada de Sarunas Jasikevicius en el puesto de Svetislav Pesic, la gran prioridad del Barça es el fichaje de un pívot para apuntalar su juego interior y cubrir la vacante dejada por la marcha de Ante Tomic. El objetivo número uno es el checo Jan Vesely, uno de los ‘center’ más determinantes del basket europeo en los últimos años y MVP de la Euroliga en 2018-2019, aunque se trata de una operación difícil pues el jugador tiene dos años más de contrato con el
Fenerbahçe
, el equipo que le trajo de vuelta de la NBA en 2014.
Operación difícil pero no imposible, ya que el Fenerbahçe tiene que soltar lastre para adecuarse a su nueva situación económica. La crisis que se vive en Turquía, agravada por la pérdida de ingresos provocada por la pandemia de coronavirus, obliga al equipo de Estambul a una importante rebaja de presupuesto, cuya primera consecuencia ha sido el adiós del técnico Zeljko Obradovic después de siete temporadas al frente del equipo. Poco después se hizo oficial la salida de Luigi Datome rumbo al Armani Milan. La marcha del alero italiano no será la única de un jugador con contrato en vigor del equipo turco. Hace tres días preguntaron al presidente del Fenerbaçe, el millonario Ali Koc, si Jan Vesely, Kostas Sloukas y Nando de Colo seguirían en el equipo la próxima temporada y este se limitó a responder “quién sabe”.
Vesely renovó con el Fener en 2019 y le restan aún dos temporadas de contrato por una importante suma, que algunas fuentes sitúan en torno a los 2,4 millones de euros netos anuales. Parece difícil que el Barça pueda llegar a esa cantidad pero es uno de los pocos equipos europeos que pueden moverse en grandes cifras en el contexto actual de reducciones presupuestarias. El paraguas del club de fútbol y la discreta dependencia de la venta de entradas en la cuenta de ingresos hace bastante más llevadera la actual situación para el Barça en comparación con muchos de sus rivales. Con los equipos griegos de capa caída y el CSKA Moscú y el Real Madrid ya con pívots de nivel top (Tavares y Milutinov) en nómina, las opciones del Barça no pueden despreciarse. Eso sí, siempre que los recortes del Fenerbahçe tengan a Vesely como protagonista por delante de otros de sus compañeros con contratos muy altos, caso de De Colo o Sloukas.
El checo viene de una temporada complicada por una lesión de rodilla pero cuando está bien físicamente es uno de los jugadores más determinantes de Europa por su atleticismo, su capacidad para jugar por encima del aro y su facilidad para correr la cancha a pesar de sus 2,13 de estatura. En la última Euroliga firmó unos promedios de 8,6 puntos, 4,2 rebotes y 12,1 de valoración pero en la anterior, cuando fue MVP de la Euroliga, promedió 12,3 puntos, 4,7 rebotes y 17,6 de valoración.
Otros dos nombres que han surgido en los últimos días como posibles refuerzos interiores del Barça tras la marcha de Tomic son los del lituano Arturas Gudaitis y el estadounidense Zach LeDay. Sin embargo, no parece que el club azulgrana esté, al menos de momento, considerando seriamente la incorporación de ninguno de ellos. Gudaitis saldrá del Armani Milan a pesar de que tiene un año más de contrato pero a día de ayer no había sido contactado por nadie del Barça respecto a un posible interés del club azulgrana. El pívot de 27 años y 2,08 ha explorado sus opciones de futuro pero no se piensa mover hasta que su actual equipo le presente una oferta aceptable de desvinculación.
El interior que debe ocupar su plaza en Milan es precisamente Zach LeDay, con el que el Armani tendría un acuerdo que no hará oficial hasta confirmarse la salida de Gudaitis. LeDay (26 años, solo 2,01 pero muy atlético) ha estado esta temporada a las órdenes de Jasikevicius en el Zalgiris.
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