El entrenador del Cádiz, Álvaro Cervera, ha sido sancionado con cuatro partidos de suspensión por el Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol (RFEF) a raíz de unas declaraciones del técnico tras el encuentro de la quinta jornada de LaLiga frente el Granada, anunció este miércoles el club andaluz, que también calificó como “injusta” la decisión y que la recurrirá.
“En la tarde de hoy, el Cádiz Club de Fútbol ha recibido notificación del Comité de Competición de la RFEF de la sanción al entrenador Álvaro Cervera de cuatro partidos, tras la resolución del juez instructor que se inició con la denuncia presentada por el departamento de integridad de la RFEF”, señala el escrito.
“La entidad considera injusta y desproporcionada dicha sanción, por lo que ya está trabajando para llevar a cabo los recursos pertinentes, que demuestren que nuestro entrenador en ningún momento realizó ninguna manifestación contraria a la normativa vigente, y por supuesto lesiva ante estamento arbitral, al que hemos defendido y defenderemos siempre”, añade el comunicado del Cádiz.
El pasado 4 de octubre, a la conclusión del partido de la quinta jornada disputado entre el Cádiz y el Granada en el estadio Ramón de Carranza, que acabó con empate a uno, Álvaro Cervera se refirió a un posible penalti el área granadina en los últimos minutos del choque.
El técnico cadista comentó, a preguntas de los periodistas, que el árbitro del partido, Javier Alberola Rojas, del Comité Castellano-Manchego, y sus ayudantes no pitaron penalti en una caída de Alberto Perea tras entrada de Foulquier en el área granadina (m.86) es porque “no quisieron”.
El técnico manifestó que la jugada la había “visto todo el mundo” y añadió que para él “no tiene explicación” no haber señalado la infracción.
Días después, el presidente del Cádiz, Manuel Vizcaíno, respaldó al entrenador de su equipo, a quien la Federación Española le incoó un expediente por las declaraciones en relación al arbitraje del encuentro.
Vizcaíno, en una rueda de prensa telemática, reiteró las declaraciones de Cervera sobre ese presunto penalti, aunque aludió también a la “honradez” del colectivo arbitral, que “normalmente es maltratado”, pero en lo que se refiere a esta acción manifestó que las declaraciones de Cervera “no cuestionan” esa honradez.
Vizcaíno recordó que Cervera no utilizó un lenguaje “ofensivo, insultante, humillante o malsonante” y apostilló que el penalti era, a su juicio, “de libro”.
La cabeza visible del consejo de administración del Cádiz dijo que el VAR es la herramienta que “más acerca a los (equipos) pequeños a los grandes” y que debe “ayudar” al árbitro para “tomar la mejor decisión”, pero que en este caso “no ayudó al árbitro”, del que está “convencido” de su honradez y de que “no lo vio”.
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