Tocaba dar el do de pecho y lo que sonó en Stamford Bridge fue una deliciosa sintonía que hizo disfrutar, y mucho, a la afición del Chelsea. El conjunto londinense llegaba a la tercera jornada siendo colista del grupo E, con un solo punto, y por ende no podía fallar si no quería que se le complicase en exceso su futuro en la competición. Delante estaba el Milan, o por lo menos eso decía el calendario, porque el equipo que jugó de blanco en el Bridge no pareció ser, ni de lejos, el vigente campeón de la Serie A. A buen seguro que las bajas que tenía Pioli (Maignan, Kjaer, Theo, Junior Messias, Saelemakers, Ibra…) influyeron en que la cosa acabase con 3-0 en el marcador.
Con Edouard Mendy recuperado, existía la duda de si Potter continuaría o no contando con Kepa como titular, y lo hizo. Y aunque el tanteo final pueda llevar al error de pensar que el guardameta español no tuvo un peso significativo en el triunfo, la realidad es que sí que lo tuvo. Porque el Chelsea abrió el marcador en el 24′, por mediación de Fofana tras un barullo en el área, y fue muy superior al Milan en el cómputo global de la primera parte, pero en el último suspiro de la misma fue Kepa el que le negó el empate a De Ketelaere con una gran intervención.
Sea como fuere, se llegó al descanso con 1-0 en el luminoso y flotando en el ambiente que mucho tenía que mejorar el Milan si no quería que el partido se le escapase. Pero lejos de hacerlo, el conjunto italiano (con Sergiño Dest completando todo el partido) se vio claramente superado por el Chelsea en el regreso de los vestuarios y con goles de Aubameyang asistido por Reece James (56′) y del propio lateral derecho un poco más tarde (62′) el encuentro quedó visto para sentencia cuando restaba media hora por jugarse.
De ahí en adelante poco historia tuvo la contienda. El Chelsea se mostró satisfecho con su triunfo mientras que el Milan, consciente de verse derrotado, pareció ponerse a pensar en el próximo sábado, cuando recibe a la Juventus en partido de Serie A.
Auba encontró un socio de oro en Reece James
Cumplió con creces un Chelsea que se la jugaba y cuyo único punto negro fue que se lesionó Fofana. Habiendo llegado al ecuador, este grupo E lo lidera el Salzburgo con 5 puntos, le siguen Chelsea y Milan con 4 y lo cierra el Dinamo Zagreb con 3. Está precioso.