El Chelsea jugará la Champions la próxima temporada tras finalizar en la cuarta posición de la clasificación de la Premier League. El equipo de Tuchel perdió contra el Aston Villa pese a depender de sí mismo y llegó a estar fuera durante muchos minutos, pero la derrota del Leicester contra el Tottenham (2-4) le salvó en una mala tarde y le abre las puertas de la máxima competición continental.
El cuadro blue empezó a todo tren el duelo, consciente de lo que había en juego, mandando en el juego y generando ocasiones, pero con el paso de los minutos se fue desinflando y lo aprovechó el Villa para ir creciendo poco a poco.
La ocasión de Mount en el minuto 23’ abrió el partido como un melón. El Villa se quitó los complejos y empezó a buscar el juego directo sobre Traore, al que no pudieron echar el lazo ni Reece James ni Thiago Silva. Para colmo de males del Chelsea, la pérdida de control del partido vino acompañada por la entrada en escena de Grealish. El mediapunta de los villanos sacó de quicio a los blues por juego y actitud, forzando faltas y amarillas y desplegando su magia en la zona de tres cuartos. Los locales gozaron de varias oportunidades, pero solo la mala puntería de El-Ghazi impidió que se adelantaran en el marcador.
Al filo del descanso, el Villa golpeó primero en una gran jugada de estrategia. Targett sacó en raso un saque de esquina desde la izquierda y Bertrand Traoré apareció totalmente solo para colar el balón por la escuadra con un gran zurdazo (43’).
El mazazo fue doble para los de Tuchel porque Mendy, en su intento de parar el disparo, se dio un fuerte golpe contra el palo y tuvo que ser sustituido al descanso por Kepa. Se desconoce si la participación del meta francés corre peligro para la disputa de la final de la Champions del próximo sábado contra el Manchester City.
La segunda parte empezó de la peor manera posible para el Chelsea. Jorginho, desastroso en el primer acto, cometió un penalti muy claro sobre Traoré que El-Ghazi transformó en el 2-0. Con el agua al cuello y sin margen, Tuchel quemó las naves dando entrada a Havertz y Ziyech por Jorginho y Kovacic, que además tenían amarilla.
Los cambios dieron la vuelta al escenario y el Chelsea recuperó el dominio del encuentro. Pulisic, desaparecido hasta entonces, empezó a asociarse con Havertz y Ziyech en el balcón del área rival y por ahí llegó el gol de Chillwell, aprovechando un gran centro del extremo norteamericano (70’).
El equipo de Tuchel no aflojó y siguió apretando en busca del gol, pero las buenas noticias que llegaban de Leicester, donde su rival por la cuarta plaza iba perdiendo, aliviaron a los blues. A dos minutos del final, Azpilicueta fue expulsado por un manotazo a Grealish y el 2-4 de Bale en Leicester puso punto y final a la lucha de un mal Chelsea en Villa Park.
A seis días de la gran final de la Champions, el Chelsea dio síntomas preocupantes pero estará en la próxima edición pase lo que pase en Oporto.
Ficha técnica
2- Aston Villa: Emiliano Martínez; Konsa, Hause, Mings, Targett; McGinn, Nakamba; Traoré (Chukwuemeka, 73’), Grealish, El-Ghazi (Ramsey, 79’); Watkins
1- Chelsea: Mendy (Kepa, 46’); Reece James, Thiago Silva, Rudiger; Azpilicueta, Kovacic (Havertz, 66’), Jorginho (Ziyech, 60’), Chilwell; Mount, Pulisic; Werner
Goles: 1-0, Traoré (43’); 2-0, El-Ghazi (pen.) (52’); 2-1, Chilwell (70’)
Árbitro: Stuart Attwell. Roja: Azpilicueta (89’). Amarilla: Jorginho (45’), Werner (47’), Kovacic (49’), McGinn (65’), Nakamba (75’) Emiliano Martínez (82’)
Estadio: Villa Park
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