El Consejo Superior de Deportes (CSD) agradeció a la Liga Profesional de Fútbol Femenino (LPFF) y a la Federación Española de Fútbol (RFEF) el acuerdo para acabar con la huelga arbitral y pidió a las partes que “mantengan el espíritu de acuerdo” para la firma del futuro convenio de coordinación.
“Queremos que el espíritu de acuerdo se mantenga para la firma del futuro convenio de coordinación, un camino que hemos allanado tras decidir y resolver, en varias resoluciones, aspectos clave como el número de equipos, ascensos y descensos; la designación del tercer miembro tanto del Comité Arbitral como del Comité de Disciplina; o el reparto de competencias respecto a sorteo, bases de competición, balón, publicidad, derechos comerciales, alineación de futbolistas, suplentes y sustituciones, homenajes y situaciones de causa mayor como la que impulsó el Covid”, señaló el organismo.
Para desbloquear el comienzo de la liga, que no pudo hacerse la semana pasada por el paro de las árbitras, el CSD alcanzó un acuerdo con la RFEF y se comprometió a abonar a las árbitras una cantidad anual de 350.000 euros durante las tres primeras temporadas de liga para sus fondos de fin de carrera.
Tras el anuncio de este compromiso, la LPFF anunció casi a medianoche de ayer que las árbitras habían aceptado su propuesta económica, de forma que las árbitras principales pasarán a cobrar de 300 a 1.666 euros por partido, las asistentes de 166 a 1.066€ por partido y las cuartas árbitras de 84 a 250€ por encuentro.
“Toda negociación conlleva, para las partes, una rebaja de las expectativas iniciales. Y es en este punto donde hay que dejar claro que Consejo, LPFF, RFEF y colegiadas han sabido renunciar a alguna de sus pretensiones para poner en marcha la competición”, indicó el CSD que se ha “comprometido a trabajar por el reconocimiento profesional de las árbitras” y abonará anualmente 350.000€ durante las tres primeras temporadas de liga.
El organismo que preside José Manuel Franco mostró su “reconocimiento, cariño, respeto y agradecimiento al colectivo de árbitras, clave en la resolución del conflicto”, y lanzó también “un llamamiento a liga, federación, clubes, jugadoras, árbitras y demás involucrados para que, entre todos, construyamos poco a poco la mejor competición femenina de fútbol del mundo”.
“Pedimos también a la afición que se deje seducir por la calidad de nuestras futbolistas y llene, desde este fin de semana, los estadios. Hagamos posible este sueño y marquemos el camino que deben seguir otras disciplinas, siempre con el apoyo cerrado del Consejo para el reconocimiento de la mujer en el deporte”, agregó.
La LPFF recordó anoche que “la propuesta de la RFEF y de las árbitras, comenzaba, no terminaba, por un recibo arbitral de 21.000 euros por partido, pretendiendo asemejarlo al recibo de Segunda División Masculina, LaLiga Smartbank, una competición que genera en torno a 150 millones de euros anuales por derechos de televisión”.
“Ello hubiera supuesto para la Liga F y sus Clubes un gasto arbitral de 5 millones de euros por temporada, esto es, el 70% de los ingresos audiovisuales que genera la competición irían destinados a gasto arbitral”, añadió.