Tras la derrota sufrida ayer en el Audi Arena (59-52) a manos del Bayern de Munich, el FC Barcelona se jugará su presencia en la Final Four de la Euroliga, donde se mediría al Real Madrid en semifinales, en el quinto y decisivo encuentro de esta serie de cuartos, que tendrá lugar en el Palau Blaugrana el próximo martes a las 20h.
No es la situación que los aficionados azulgrana esperaban, sobretodo tras finalizar primeros en la fase regular y medirse al octavo clasificado en estos playoffs, pero lo cierto es que hay varios motivos, alguno más curioso que otros, que invitan al optimismo del seguido ‘culé’.
El más lógico (además de la, a priori, superioridad en cuanto a la calidad/cantidad de sus jugadores) es el del ‘factor cancha’, ya que el Barça tendrá la ventaja de jugar ante su público este quinto y decisivo partido de cuartos de final.
Pero repasando un poco la historia (más o menos) reciente de la Euroliga nos encontramos un ‘precedente’ (o algo parecido) al que pueden aferrarse los aficionados azulgrana más ‘rebuscados’.
Pongámonos en contexto y retrocedamos hasta la temporada 2013/14, última ocasión en la que Barça y Real Madrid se vieron las caras en una Final Four de la Euroliga.
Tras realizar un TOP16 espectacular (el formato de la competición era diferente por aquel entonces), el FC Barcelona de Xavi Pascual se enfrentó al Galatasaray en los playoffs de cuartos de final. Los azulgrana no tuvieron ningñun problema para deshacerse del conjunto otomano por un claro 3-0.
El Real Madrid, por su parte, tuvo que afrontar una complicada serie, con ventaja de campo, ante Olympiacos que se decidió… en el quinto y decisivo encuentro en el Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid (83-69).
De hecho, es la misma situación que se puede dar este año… pero con los papeles cambiados: el cuadro madridista se ha deshecho cómodamente del Maccabi Tel-Aviv por un claro 3-0 (como hizo el Barça entonces) y conjunto culé, en caso de clasificarse lo haría en el quinto partido, tal y como hicieron los blancos en 2014.
Y, por si fuera poco, ahora es cuando la teoría se vuelve algo más ‘retorcida’ para los azulgrana: en 2014, debido a la forma que tuvieron ambos equipos de clasificarse para la Final Four, todo el mundo daba como favorito a un Barça… que acabó perdiendo por un contundente 62-100 ante el Real Madrid.
Un precedente de muy doloroso recuerdo para los culés, aunque si seguimos con la curiosa teoría de los papeles cambiados, seguro que todos los aficionados azulgrana firmarían que la historia se volviera a repetir… pero al revés.
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