El desenlace de la Europa League ya calienta motores. El Sevilla buscará mañana su séptimo título en la competición frente a una Roma deseosa de hacer historia de la mano de José Mourinho. La final de este año tiene todos los ingredientes para ser apoteósica, pues ni el cuadro hispalense ni el ducho técnico portugués han experimentado la derrota llegados a este punto.
Dado que Sevilla y Mourinho tienen un historial inmaculado en las finales de la Europa League, podría decirse que el partido entre ambos es el de dos infalibles. Los sevillistas han tocado plata en las seis finales jugadas y son los reyes absolutos del torneo con seis victorias, mientras que el preparador de la Roma ha conseguido el título en las dos disputadas hasta la fecha.
El Sevilla inició su idilio con la Europa League en 2006. En Eindhoven ganó su primera corona goleando al Middlesbrough inglés (4-0) y un año después superó al Espanyol en una agónica tanda de penaltis (3-1) tras empatar 2-2 en el tiempo reglamentario. Tardarían los hispalenses en regresar a la batalla por el título, pero cuando lo hicieron enlazaron tres títulos de forma consecutiva (2014, 2015 y 2016). La última muesca fue la conseguida en Colonia ante el Inter (3-2) en 2020, por lo que ni la pandemia hizo descarrilar de su trayectoria a un Sevilla impoluto en su competición fetiche. Seis finales, seis títulos.
Poco tiene que envidiar un José Mourinho que ha levantado dos veces la Europa League. Lo hizo en 2003, cuando aún se denominaba copa de la UEFA, al frente de un sorprendente Porto y luego repitió en 2017 a los mandos del Manchester United. No obstante, las finales de la Europa League no son las únicas en las que mantiene una estadística sin mácula, pues también ganó las dos disputadas en la Champions (Porto e Inter) y la del curso pasado en la Conference League (Roma) de nueva creación.
La historia dice que si en Europa hay título de por medio, Mourinho no falla, pues van cinco títulos en las mismas finales. La única esperanza del Sevilla es que el portugués ha resbalado en otros tres desenlaces europeos, aunque de menor calado. La Supercopa de Europa es el trofeo maldito del actual técnico de la Roma, derrotado por el Milan en 2003, por el Bayern de Pep Guardiola en 2013 y por el Real Madrid, su ex equipo, en 2017.
La ilusión de Mendilibar
El preparador del Sevilla se ha convertido en uno de los técnicos de moda en el fútbol español. Aterrizó hace dos meses en el Sánchez-Pizjuán y sacó a los hispalenses del serio peligro del descenso, además de meterlos en la final de la Europa League. Todo eso después de que en su dilatado currículum como entrenador solo acumule hasta ahora seis partidos internacionales, y dos de ellos hace dieciocho años con el Athletic Club.
‘Mendi’ ha sabido hacer reaccionar a un Sevilla que ha mostrado su carácter en la Europa League, derrotando al Manchester United en cuartos y la Juventus en semifinales para optar a su séptima corona. El vizcaíno, de 62 años, tiene la ilusión de un niño por conquistar una competición donde los nervionenses nunca han dejado escapar la posibilidad de levantar el título.
Mourinho y Sevilla han ganado siempre en la final de la Europa League