Nunca un derbi entre Real y Athletic o vicecersa ha levantado menos interés en Bilbao. Es lo que pasa cuando el calendario se comprime de tal modo. Incrustado entre los cuartos y las semis coperas, la cita de Anoeta ha sido como ese examen de una materia odiada y complicada que te toca entre otros dos exámenes en los que quieres lucirte. Pues eso, que lo das por suspendido.
Eso fue lo que dijo la alineación de
Gaizka
Garitano
, con solo dos titulares habituales de campo,
Capa
y
Yeray
. Pese a las críticas de alguno, respaldo al cien por cien la decisión adoptada por el técnico deriotarra. La pelea por Europa vía Liga es un imposible tal y como están las cosas. Y jugar una final
de
Copa, que además puede certificar el pasaporte continental y llevarnos a la Supercopa árabe, son palabras mayores.
La Real, volviendo al encuentro del pasado domingo en Donostia, demostró su creatividad de medio campo hacia delante. Lo de
Isak
no es de este mundo. El joven delantero sueco solo destrozó al Athletic desde que salió al césped recién comenzada la segunda mitad. Su impacto en el partido disputado en el Reale
Arena fue brutal. En Sevilla, si el oso cae en la trampa y no se escapa vivo, habrá que preparar algo para pararle.
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