Cuarto día de juicio para Benjamin Mendy y, seguramente, el más duro hasta la fecha. Y es que, durante la vista, el jurado ha podido escuchar una entrevista policial pregrabada con una de las presuntas víctimas, a la que conoció en un bar.
Según la joven, el futbolista le robó su teléfono móvil y se metió a una habitación que “abrió con una huella digital”. “Quiero mi teléfono, no quiero tener sexo contigo. Me quiero ir”, le habría dicho. “Te lo prometo, solo quiero mirarte. No puedes salir de todos modos”, le habría respondido el jugador del Manchester City.
“Pensé en desvestirme y al menos no tenía que hacer nada con él. Mi cuerpo estaba tan tenso. Era tanto el dolor. Nunca antes había vivido algo así. Le decía ‘no soy tímida, simplemente no quiero tener sexo contigo'”, continúa el desgarrador relato de la muchacha.
Unas palabras a las que el defensa hacía caso omiso: “Eres demasiado tímida. No se lo digas a nadie y puedes venir aquí todas las noches”, insistía como dando por hecho que era un “privilegio” tener relaciones sexuales con él.
Benjamin Mendy, a su llegada a los tribunales
En mayo de este año, Mendy se declaró inocente de los nueve cargos de delitos sexuales que pesan sobre él. Ahora, podría enfrentarse a una pena de entre 5 y 20 años de cárcel de salir finalmente culpable. Incluso, a una posible cadena perpetua.