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El Eibar, a repetir el milagro del 99

Al Eibar, farolillo rojo de LaLiga Santander y con la salvación a siete puntos a falta de cinco jornadas, ya sólo le queda apelar a su milagro del 20 de junio de 1999 para evitar el descenso. Hace 22 años, los armeros, que estaban casi desahuciados, consumaron una histórica salvación con cinco victorias en las cinco postreras jornadas, ante Osasuna (2-0), Hércules (1-3), Barça B (2-0), Albacete (0-1) y Toledo (3-0, para sellar su permanencia en Segunda A.

A falta de seis jornadas para el final, el Eibar, que había permanecido casi todo el curso en descenso, estaba a 12 puntos de la salvación. Antes de la última jornada habían descendido Ourense y Hércules y para el restante puesto, Eibar y Barça B tenían 44 puntos; Leganés y Mallorca B, 46 y Logroñés, 47.

El Eibar, entrenado por Alfonso Barasoain, afrontó la última jornada necesitado de una carambola para mantenerse. Era necesario que los vascos ganaran en casa a un Toledo que aspiraba a los puestos de promoción de ascenso y que el Mallorca B cayese ante el Hércules. El partido de Ipurua se decantó enseguida del lado local con los goles de Goio (1’), Iturrino (54’) y Arenaza (80’) y el duelo acabó 3-0. El público estuvo más pendiente de los transistores para seguir el desarrollo del enfrentamiento entre Mallorca B y Hércules (que ya estaba descendido), dos equipos cuyo propietario era la misma persona: el empresario balear Antonio Asensio.

El Mallorca B, que nunca había estado en posición de descenso en toda la temporada, recibió dos goles y acortó distancias en el 70’, pero los alicantinos anotaron de nuevo en el 86’, gracias a una pena máxima transformada por Conte, para establecer el definitivo 1-3. Este partido lo arbitró el donostiarra Xabier Eleizegi, actualmente delegado arbitral de la Real Sociedad, que pitó dos penaltis contra los locales y enseñó una roja a cada equipo. Consumada la salvación ‘in extremis’ se produjo una invasión del campo por parte del público de Ipurua para celebrar una milagrosa salvación en la categoría de plata que jamás olvidará la afición azulgrana.


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