El inolvidable Luis Aragonés tenía una forma de entender el fútbol que bien puede ser utilizada para explicar lo que necesita el Espanyol para salir del pozo. “Ganar, ganar y volver a ganar. Eso es el fútbol”, dijo El Sabio de Hortaleza. Es lo que precisa el cuadro blanquiazul, que recibe esta tarde a Osasuna 5 puntos por debajo de la zona que otorgaría la permanencia, y habiendo sumado 1 solo punto (el domingo pasado ante el Getafe) en los siete partidos que ha disputado como local en esta Liga. El margen de error de los de Pablo Machín es exiguo, y a la vuelta de la esquina está la siempre complicada visita al Santiago Bernabéu. Por todo ello, la exigencia es máxima en esta ocasión ante un Osasuna que, de la mano de Arrasate, busca un triunfo con el que reencontrarse con la buena dinámica tras caer derrotado el pasado fin de semana ante el Athletic.
Tras empatar ‘in extremis’ ante el Ferencvaros y certificar con ello que será cabeza de serie en el sorteo de los dieciseisavos de final de la Europa League, el Espanyol vuelve a ponerse el traje de LaLiga, ese que no le sienta tan bien como el de los jueves pero quiere ajustarse con los remiendos que hagan falta.
Todo apunta a que acontecerán una gran cantidad de cambios respecto al equipo que jugó en Budapest, volviendo al ‘once’ los David López, Marc Roca, Pedrosa, Wu Lei y compañía. Y la principal duda está en el ataque en cuanto a si será Víctor Campuzano, que jugó ante el Ferencvaros, o Jonathan Calleri, que reapareció tras lesión, quien acompañe al delantero chino y a Darder en el tridente ofensivo.
Por otra parte, hay futbolistas como Pol Lozano y Pipa que, con su actuación en el reciente compromiso de la Europa League, pidieron a gritos más minutos de juego, pero no parece que vayan a estar entre los elegidos para el equipo titular.
En cuanto a Osasuna, los de Arrasate llegan sin su portero titular Rubén Martínez, actualmente lesionado, y también es baja otro futbolista importante como Aridane. En el aspecto individual, el mayor peligro de Osasuna está en ‘Chimy’ Ávila, pero por encima de cualquier nombre propio, el cuadro rojillo destaca como bloque. Se viene una lucha sin cuartel en el RCDE Stadium.
fasdg
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