Fernando Alonso ya ha reiterado en varias ocasiones que coches como los Alpha Tauri o los Ferrari están “en otra liga” en cuanto a prestaciones, degradación de gomas y ritmo de carrera en tanda larga. Pero como ya explicó en el anterior Gran Premio de Francia, la salida en parado es uno de los momentos en los que Fernando puede sacar a relucir su talento y astucia y pelear con sus oponentes en el cuerpo a cuerpo para ganar alguna plaza que en plena carrera sería muy difícil de conseguir.
“Ha sido mi punto fuerte por 20 años. ¿Por qué no iba a seguir siéndolo ahora? La salida es ese momento en la carrera en el que necesitas improvisar un poco y necesitas ser creativo. No hay rendimiento de neumáticos ni rendimiento del coche, ahí no cuenta. Es solo tú y tu instinto. Así que me divierto con este tipo de vueltas”, dijo en Francia. Y en Austria, lo volvió a demostrar. En este caso, solo pudo ganar las posiciones de Charles Leclerc y Pierre Gasly, que se tocaron en la curva 1 y la curva 3, pero en este caso, fue astuto al evitar un accidente acudiendo por el interior de la curva 1 mientras por el exterior, el francés y el monegasco se tocaban por primera vez.
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Gasly se salió por el exterior de la curva, por fuera de la pista, y así pudo acelerar más para pasar de nuevo al asturiano, igual que Leclerc, ya con parte del alerón delantero destrozado. Ahí, el ovetense volvió a pasar a ambos coches cerrándose, mirando los retrovisores para defender su posición por dentro en la curva 3 a alargando su frenada al máximo, exhibiendo uno de sus puntos más fuertes. Leclerc volvía a pasar por el exterior, pero debía entrar a boxes al final de esa vuelta, por lo que esa plaza y la de Tsunoda ya estaban ganadas. Le sorprendió entonces Stroll en plena recta de la curva 3 a la 4, con mayor velocidad punta por su motor Mercedes, pero el ovetense volvió a hacerse fuerte mediante una frenada tremenda por el exterior con la que lograba ponerle las cosas difíciles al canadiense, que con un coche con mayor ritmo, acabaría superándolo ya por prestaciones del monoplaza.
Alonso ganó así dos posiciones en el arranque evitando la montonera en la curva 1 y 3, puntos donde siempre se pueden generar embudos y accidentes. Ello se suma a las dos plazas que ganó en la
salida del GP de Francia, y a las 8 que consiguió en 3 salidas (dos en parado y una tras el ‘safety’) en el GP de Azerbaiyán
.
El ovetense aseguraba en Francia que, según las estadísticas del equipo, era “el 2º o 3º mejor en las salidas” de toda la parrilla, todo ello, fruto a sus manos, a su astucia en los primeros metros y a una gran reacción ante las luces del semáforo. Además, el español ha reiterado en las últimas carreras la gran mejora que ha conseguido Alpine, con el apoyo de Fernando, en el sistema de arranque del coche tras meses de trabajo, algo que ha permitido al ovetense sentirse a su mejor nivel en los inicios de los últimos Grandes Premios.
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